El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró este lunes que una intervención “militarmente” contra su país significaría “el fin político” de su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, quien nuevamente insistió en que no descarta ninguna opción respecto a Venezuela. Las declaraciones ocurren en un contexto de creciente tensión entre ambos gobiernos y en medio de acusaciones cruzadas.
Maduro sostuvo que existe “un empeño de sectores de poder en los Estados Unidos por destruir al presidente Trump” utilizando dos temas: el caso del pederasta Jeffrey Epstein y la situación venezolana. Según su argumento, estos grupos buscan provocar que Trump tome la decisión “más grave” de su vida en relación con Venezuela.
El mandatario venezolano afirmó que buscan que Donald Trump “se meta militarmente contra Venezuela”, lo que, según él, representaría un costo político irreversible para el líder estadounidense. Añadió que esa supuesta provocación no proviene únicamente de adversarios ideológicos, sino también de personas cercanas al propio Trump, quienes —según dijo— ya estarían pensando en una “era posTrump”.
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Nicolás Maduro acusa agresión psicológica de Donald Trump
Maduro señaló que no puede identificar con precisión quiénes estarían impulsando estas acciones, aunque aseguró que si lo supiera “lo dijera”. No obstante, insistió en que esas presiones forman parte de un clima de “agresión psicológica” que, aseguró, se ha mantenido por 16 semanas consecutivas.
Durante ese tiempo, explicó, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana ha llevado a cabo ejercicios como el ‘Plan Independencia 200’, y sostuvo que ese despliegue ha fortalecido el poder militar venezolano. Reiteró que dicho poder no tiene fines expansionistas ni busca operaciones en el exterior, sino que está orientado exclusivamente a la defensa del territorio y la paz interna.
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En otro momento de su declaración, Nicolás Maduro se dijo dispuesto a hablar “face to face” con Donald Trump, luego de que el presidente estadounidense asegurara que está abierto a conversar con su par venezolano. Trump, sin embargo, también lo acusó de permitir el envío de integrantes del Tren de Aragua a territorio estadounidense.
El republicano declaró el domingo que podrían existir “discusiones” con Maduro, asegurando que “Venezuela quiere hablar”. Además, reiteró que ya ha tomado una decisión respecto a futuras medidas sobre el país suramericano, aunque no ofreció detalles, destaca la agencia internacional EFE.
Ese mismo domingo, el Departamento de Estado anunció que designará al Cartel de los Soles como organización terrorista extranjera a partir del 24 de noviembre. Washington vincula a este grupo con Maduro, mientras que el gobierno venezolano considera tal señalamiento como “un invento”.
Con sus más recientes declaraciones, Nicolás Maduro y Donald Trump reavivaron la tensión bilateral, marcada por acusaciones, advertencias y posibles escenarios de confrontación. La afirmación de Maduro sobre el supuesto “fin político” de Trump ante una intervención en Venezuela añade un nuevo elemento a la disputa, que continúa escalando en medio de las decisiones anunciadas por Estados Unidos y las respuestas del gobierno venezolano.