Llegó el día y Donald Trump llega a la Casa Blanca por segunda ocasión y se alista a reformar el gobierno respecto a lo hecho por Joe Biden, para lo cual empleará una herramienta rápida que tienen los presidentes de EU: la orden ejecutiva.
Se trata de práctica común que un presidente entrante firme varias órdenes ejecutivas, las cuales permiten a un presidente ejercer poder sin la acción del Congreso.
Sin embargo, también hay límites en lo que las órdenes pueden lograr, pero ¿qué es?, aquí te decimos.
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¿Qué son las órdenes ejecutivas?
Se trata de declaraciones firmadas sobre cómo el presidente desea que se administre el gobierno federal, las cuales pueden ser instrucciones para las agencias federales o solicitudes de informes.
Las órdenes ejecutivas —y sus hermanos en la creación de políticas, la proclamación y el memorando político— también son utilizadas por los presidentes para perseguir agendas que no pueden lograr a través del Congreso.
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Los nuevos presidentes pueden emitir órdenes para cancelar las órdenes de sus predecesores.
De acuerdo con la Asociación de Abogados de Estados Unidos, citada por la agencia AP, las órdenes no requieren aprobación del Congreso y no pueden ser revocadas directamente por los legisladores.
No obstante, el Congreso podría bloquear que una orden se cumpla eliminando fondos o creando otros obstáculos.
Una práctica común
A lo largo de la historia de Estados Unidos, ha habido varias miles de órdenes ejecutivas, muestran datos del Proyecto Presidencia Estadounidense de la Universidad de California, Santa Bárbara y así han firmado los principales presidentes:
- George Washington firmó ocho órdenes ejecutivas
- Franklin Delano Roosevelt 3 mil 721
- Durante su primer mandato, Donald Trump firmó 220
- Joe Biden firmó 160 hasta el 20 de diciembre.
Trump pronosticó firmar hasta 100 órdenes ejecutivas en su primer día, posiblemente cubriendo deportaciones, la frontera entre Estados Unidos y México, energía doméstica, reglas del “Schedule F” para trabajadores federales, políticas de género en escuelas y mandatos de vacunas, entre otras promesas del Día 1 hechas durante su campaña.
También ha prometido una orden ejecutiva para dar más tiempo para la venta de TikTok.
Trump ha pedido al legislador Jeff Van Drew, republicano de Nueva Jersey, que redacte una orden para detener el desarrollo de molinos de viento en alta mar para generar electricidad.
Muchas de las medidas de Trump probablemente enfrentarán oposición demócrata.
Sin embargo, existen límites para las órdenes ejecutivas, tanto el Congreso como los tribunales pueden bloquear potencialmente esta herramienta.
En 1992 el Congreso revocó una orden ejecutiva del entonces presidente George H.W. Bush que establecería un banco de tejido fetal humano para investigación científica al aprobar una medida para que la orden “no tuviera ningún efecto legal”.
Llegó el día y Donald Trump llega a la Casa Blanca por segunda ocasión y se alista a reformar el gobierno respecto a lo hecho por Joe Biden, para lo cual empleará una herramienta rápida que tienen los presidentes de EU: la orden ejecutiva.