Los rebeldes hutíes de Yemen han acusado a Israel de estar detrás de la explosión coordinada de dispositivos buscapersonas, que dejó un saldo de ocho muertos y más de 2 mil 800 personas heridas, entre ellas, varios integrantes del grupo chií libanés Hezbulá.
"Condenamos el ataque israelí contra la seguridad de Líbano, que afectó a muchos civiles, lo que se considera un crimen descrito y una violación de la soberanía libanesa", ha manifestado el portavoz de los hutíes, Mohamed Abdelsalam, en su perfil en la red social X.
De acuerdo con un comunicado del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, "una serie de miembros del grupo libanés Hizbulá llegaron a los hospitales de Damasco y de la provincia de Rif Damasco, tras resultar heridos en la explosión de buscapersonas que llevaban encima".
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¿Qué está pasando en Líbano?
Hezbulá está presente en Siria como aliado del presidente, Bachar al Asad, y en los últimos meses ha sido objetivo de una serie de ataques selectivos israelíes, entre ellos algunos contra vehículos que circulaban por las zonas fronterizas con el Líbano.
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Sin embargo, en esta ocasión los incidentes reportados por el Observatorio Sirio de Derechos Humanos se producen en el marco de una operación a gran escala en el Líbano, donde un gran número de buscapersonas en manos de miembros de Hizbulá explotaron esta tarde de forma simultánea.
Los hutíes han atribuido así lo ocurrido a Israel, siguiendo las declaraciones previas tanto del Gobierno libanés como de la propia milicia de Hezbolá, que han informado de que llevarán a cabo una investigación del incidente y prometen una respuesta.