La tormenta tropical Francine sigue su curso y, según los pronósticos, se convertirá en huracán en las próximas horas. La región más afectada sería la costa sur de los Estados Unidos, en particular los estados de Texas y Louisiana. El Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) emitió advertencias para estas áreas, debido a los efectos potencialmente devastadores que podría traer consigo el ciclón, que se espera alcance la categoría 2 para el miércoles.
Amenaza para el sureste de Estados Unidos
De acuerdo con el pronóstico del NHC, Francine actualmente está ubicada al norte del Golfo de México, seguirá fortaleciéndose hasta convertirse en huracán. Las proyecciones indican que el miércoles tocará tierra en Louisiana, impactando con vientos fuertes, lluvias torrenciales y peligrosas marejadas ciclónicas.
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La trayectoria de Francine mantiene en alerta a las autoridades locales y a la población en la costa de Texas, Louisiana y Mississippi. Los modelos meteorológicos muestran que el ciclón afectará principalmente las zonas costeras, donde las infraestructuras suelen ser más vulnerables ante tormentas de gran magnitud.
Preparativos en Texas y Louisiana
En Texas, las ciudades costeras ya han comenzado a activar sus planes de emergencia, previendo el impacto del huracán. En localidades como Galveston, Houston y Beaumont, se espera que caigan varios centímetros de lluvia, lo que podría provocar inundaciones repentinas. Además, las compañías petroleras del Golfo de México han suspendido temporalmente sus operaciones en las plataformas marinas, ante el riesgo de marejadas ciclónicas y fuertes vientos que podrían poner en peligro la integridad de estas instalaciones.
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En Louisiana, el gobernador Jeff Landry pidió mantenerse a resguardo, preparando así a la población ante la llegada inminente del ciclón. Las áreas más vulnerables, como Lake Charles, Sulphur y Vinton, ya cuentan con protocolos de evacuación listos para ser activados si la situación lo requiere. Además, se han establecido estaciones de sacos de arena para mitigar los efectos de las inundaciones.
Lluvias torrenciales en México
Aunque el impacto directo de Francine se espera en Estados Unidos, México también sufrirá los efectos de la tormenta. Las autoridades meteorológicas han emitido advertencias por lluvias intensas en los estados de Tamaulipas, Veracruz y Nuevo León. En estas regiones, se prevé que las precipitaciones acumulen hasta 250 mm, lo que incrementa el riesgo de inundaciones y deslaves, especialmente en áreas montañosas.
Tamaulipas se encuentra en estado de alerta, con lluvias puntuales torrenciales y ráfagas de viento que podrían causar daños en infraestructuras locales. Por otro lado, en Veracruz y Nuevo León, las lluvias intensas continuarán durante toda la semana, lo que aumenta el riesgo de desbordamientos en ríos y arroyos.