El Tribunal Superior de Londres tomó una decisión importante en el caso del periodista australiano Julian Assange al aplazar su veredicto final sobre el recurso presentado. Esto significa que el fundador de Wikileaks no será extraditado a Estados Unidos de inmediato.
Los jueces Victoria Sharp y Adam Johnson, tras evaluar detenidamente los argumentos presentados por ambas partes durante varias semanas, determinaron que existe la posibilidad de que un eventual recurso del acusado tenga éxito parcial.
Por lo tanto, ofrecieron al Gobierno de Estados Unidos la oportunidad de brindar garantías contra algunos de los argumentos planteados, según reporta la agencia de noticias EFE.
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La corte otorgó un plazo de tres semanas al Gobierno estadounidense para que proporcione garantías satisfactorias de que el periodista podrá invocar la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, relacionada con la protección de la libertad de expresión.
Además, se requerirán garantías de que no será perjudicado en el juicio debido a su nacionalidad, que se le otorgarán las mismas protecciones de la Primera Enmienda que a un ciudadano estadounidense y que no se le impondrá la pena de muerte.
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En caso de que no se proporcionen estas garantías, se autorizará al fundador de Wikileaks a presentar un recurso.
Sin embargo, si se ofrecen, ambas partes tendrán la oportunidad de presentar nuevas observaciones en una audiencia programada para el próximo 20 de mayo, donde se tomará una decisión definitiva sobre la apelación.
A pesar de esta decisión, los jueces han desestimado algunos de los motivos de la solicitud de apelación, incluidos los argumentos relacionados con sus opiniones políticas.
¿Qué ha pasado con Julian Assange?
Este caso ha generado una gran atención internacional debido a las repercusiones sobre la libertad de prensa y el derecho a la información.
Por un lado, Estados Unidos busca la extradición del periodista por 18 delitos de espionaje e intrusión informática, mientras que la defensa argumenta que su caso es político y que enfrenta una posible condena de 175 años de prisión en Estados Unidos.
Tras conocerse la decisión del tribunal, su esposa, Stella Assange, declaró a las afueras del tribunal que su marido es un "prisionero político" y enfatizó que su persecución es una advertencia para quienes desafían los intereses de guerra establecidos.
El caso de Julian Assange ha sido complejo y polémico desde su detención inicial en 2010, y su situación legal sigue siendo motivo de debate en el ámbito internacional. / Con información de EFE