Las declaraciones del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, han encendido las alertas en México por la posible denominación de los cárteles del narcotráfico como organizaciones terroristas extranjeras (FTO, por sus siglas en inglés).
El planteamiento, que no es nuevo, pues en su pasada administración también lo consideró, llevaría a un punto complicado a la democracia entre los dos países.
Las palabras del republicano surgieron en un evento con el grupo ultra conservador Turning Point en Phoenix, Arizona.
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Además habría dado la instrucción al Pentágono de prepararse para utilizar fuerzas especiales, guerra cibernética, entre otras acciones.
¿Qué implicaciones tendría para México que Trump designe como organizaciones terroristas a los cárteles del narcotráfico?
Luego de las declaraciones de estadounidense, la presidenta Claudia Sheinbaum respondió que México es un país libre, soberano e independiente y que no aceptará intervencionismos.
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Esto debido a que la designación como FTO podría darle el marco legal al gobierno de EU para congelar activos, imponer sanciones económicas, restringir viajes y procesar a quienes apoyen a esas organizaciones.
Asimismo, podrían realizar acciones militares directas en territorio mexicano, que es una violación al derecho internacional y un desafío a la soberanía del país.
De esta manera, se podrían deteriorar las relaciones diplomáticas entre ambas naciones. A la situación podría sumarse tensiones adicionales en el comercio bilateral.
Este tema ya se encuentra en un periodo de tensiones debido a que el próximo mandatario estadounidense afirmó que impondrá aranceles del 25 por ciento a las exportaciones mexicanas.
En cuanto a la estrategia de seguridad, algunos sectores consideran que se podría fortalecer las herramientas legales para perseguir a las organizaciones del narcotráfico.
Por otra parte hay quienes creen que se podría agravar la violencia en México, pues la intervención militar directa podría desatar enfrentamientos a gran escala y aumentar los daños colaterales a la población civil.
Defensores de la idea argumentan que su implementación podría facilitar la desarticulación de redes criminales al permitir una mayor colaboración entre las agencias de los dos países.
Aunado a que se enviaría un mensaje contundente sobre la seriedad con la que EU aborda la crisis del fentanilo en su territorio.
Estas podrían ser las principales consecuencias de que EU designe como organizaciones terroristas a los cárteles del narcotráfico en México, a las que se añadirían otros aspectos como la imagen de México hacia el extranjero, que podrían derivar en menor inversión, por ser un país que tendría ese tipo de organizaciones en su territorio.