La cifra de víctimas mortales debido a las inundaciones provocadas por la Dana en la provincia de Valencia, ocurridas el pasado 29 de octubre, sigue sin cambios. De acuerdo con el último informe del Centro de Integración de Datos (CID), al momento se reportan la muerte de 221 personas y 5 desaparecidas.
Con el objetivo de identificar a las víctimas de esta tragedia, las autoridades correspondientes ya realizan las autopsias correspondientes, mediante diferentes métodos: 171 de ellas fueron identificadas por huellas dactilares, 46 por análisis de ADN y 4 por identificación hospitalaria.
En tanto, el número de personas desaparecidas permanece en cinco al momento.
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De acuerdo con la información de EFE, el CID es un órgano técnico compuesto por una Oficina Forense, una Oficina de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y agentes especializados de la Guardia Civil y la Policía Nacional que trabajan con el objetivo de recopilar y supervisar los informes de identificación de víctimas, según el reporte que realizan las diversas instituciones especialmente en sucesos como lo ocurrido en Valencia.
Este tiene la responsabilidad exclusiva de proporcionar al público y a los medios cifras oficiales sobre el tratamiento médico forense y las investigaciones científicas relacionadas con el suceso, a través de la Oficina de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
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Además de las pérdidas humanas, la tragedia provocada por la DANA ha dejado al momento, según datos de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) pérdidas económicas que ya superan los 9 millones 872 mil dólares. Sin embargo, dicha cifra podría ser mayor, ya que a casi un mes de los hechos, muchos de los sectores afectados no han podido hacer una valoración de los daños.
¿Qué es la DANA, el fenómeno que devastó Valencia?
De acuerdo con la Agencia Estatal de Meteorología española (Aemet), una Depresión Aislada en Nivel Altos, (DANA) es un fenómeno meteorológico que se origina tras el choque de una masa de aire frío en altura con aire caliente de la superficie, que ocasiona tormentas torrenciales.
A pesar de que no es extraño que un temporal así atraviese el territorio español, la intensidad con la que se presentó es considerado inusual y derivado del calentamiento global.
Al respecto, Omar Baddour, jefe de Monitorización Climática de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), señaló a EFE que este tipo de fenómenos podrían ser más intensos conforme aumenten las temperaturas del agua marina como la humedad de la atmósfera.