El Informe Europeo sobre Drogas 2023 reveló que Alemania es el país que más sufre por la crisis de narcóticos en la Unión Europea, ya que se posiciona en el primer lugar de muertes a causa de estos con mil 826 decesos en 2021.
Esa cifra acumula 245 fallecimientos más que en 2020, pero no solo es ese país, también se experimenta este fenómeno en España, con 774 casos en 2020, y Suecia, con 450 en 2021.
Alemania y la UE se mantienen en alerta por drogas
Europa enfrenta nuevos desafíos como el aumento de la diversidad en la oferta, con sustancias más potentes, y del consumo, además de que las incautaciones baten cifras récord.
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El informe advierte de que ahora existe "una gama más amplia de sustancias psicotrópicas, por lo general de gran potencia y pureza".
"Lo resumo con la siguiente frase: 'En todas partes, todo, todos'. Las drogas ilícitas asentadas son ahora ampliamente accesibles y siguen surgiendo nuevas sustancias potentes", advirtió el director del EMCDDA, Alexis Goosdeel.
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El documento notifica de que "como pueden venderse en forma de polvos o pastillas de aspecto similar, los consumidores pueden no ser conscientes de lo que están tomando", y señala que en 2022 se notificaron por primera vez 41 drogas nuevas en la UE, con lo que el Observatorio ya acompaña 930 nuevas sustancias.
El fentanilo preocupa a las autoridades
Los nuevos opioides sintéticos, como los derivados del fentanilo, tienen actualmente un papel "relativamente pequeño" en el panorama europeo en general, aunque suscitan preocupación en regiones como los países bálticos, donde se asocian a un aumento de las muertes por sobredosis.
"Aunque los problemas en este ámbito son relativamente limitados en la actualidad, este grupo de sustancias representa una amenaza y podría tener una repercusión más significativa en la salud y la seguridad europeas en el futuro", alerta el informe.
Las sustancias menos conocidas acarrean riesgos para la salud, como el caso de la ketamina, que puede provocar daños en la vejiga, o el "gas de la risa", con un aumento del consumo que suscita "inquietudes sanitarias" en algunas partes de Europa, incluyendo Alemania. / Con información de EFE