El Gobierno de Irán ha acusado a Estados Unidos de bloquear la investigación de la muerte del general Qasem Soleimani en un bombardeo estadounidense en Irak en enero de 2020, en unas declaraciones que tienen como motivo el tercer aniversario de su fallecimiento.
"Se han tomado las medidas necesarias para dar seguimiento al caso del martirio del general Qasem Soleimani, aunque desafortunadamente tanto los estadounidenses como los occidentales están lanzando piedras y obstáculos en la persecución legal del caso, pero las manos de la República Islámica de Irán no están atadas", señaló el ministro de Exteriores iraní, Hosein Amirabdolahian.
Camino legal
El titular de Exteriores agregó que las autoridades del país siguen "todos los caminos legales".
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"En un memorándum, anunciamos y dejamos constancia de la responsabilidad del gobierno de Estados Unidos en ese momento por este magnicidio, y seguiremos nuestra denuncia en su forma natural", explicó.
"Paralelo a eso, se han tomado otras medidas, como el hecho de que cerca de 60 funcionarios estadounidenses relevantes que estuvieron involucrados en este asesinato han sido colocados en la lista negra terrorista de la República Islámica de Irán", ha comunicado Amirabdolahian, que ha asegurado que este aspecto ha sido uno de los debates en las recientes negociaciones con Washington.
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El Ministerio justificó que esta sanción fue "precisa y correcta" porque el objetivo ha sido "llevar a estas personas ante la justicia", ha recogido la agencia de noticias IRNA.
Irán solicitó en enero de 2021 a la agencia policial Interpol que emitiera una alerta roja para lograr la detención de Trump y otras 48 personas supuestamente implicadas en el bombardeo que mató a Soleimani, entonces jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán.
El entonces jefe del aparato judicial iraní y actual presidente del país, Ebrahim Raisi, destacó que Trump "tendrá que pagar" por la "atrocidad" que supuso el bombardeo ejecutado en el aeropuerto de la capital de Irak, Bagdad, tras la llegada de Soleimani en una visita al país.
Nuevas amenazas
Por otra parte, el jefe del Estado mayor de las Fuerzas Armadas iraníes, Mohamad Hosein Baqeri, recalcó que "la venganza contra los 'cerebros' y responsables del asesinato de Soleimani no será retirada de la agenda de los jóvenes del mundo musulmán y sus seguidores en el mundo".
Asimismo, dijo que los responsables pensaron que "habían retirado el mayor obstáculo a sus objetivos arrogantes y expansionistas en el mundo musulmán" al matar a Soleimani, a quien ha descrito como "un héroe de la resistencia".
Baqeri ha incidido que los responsables de la muerte de este "héroe nacional" serán "lanzados al basurero de la historia" una vez que se cumpla la venganza por su asesinato, tal y como ha recogido la cadena de televisión iraní Press TV.
En esta línea se ha expresado el jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria, Ismail Qaani, reseñó que los enemigos de Irán "temían hasta a la sombra del mártir Qasem Soleimani" y ha agregado que "sus discípulos expulsarán a los estadounidenses de la región".
Qaani, quien reemplazó a Soleimani tras su muerte, afirmó que "la venganza ha comenzado" y ha manifestado que los responsables del bombardeo "no tendrán paz en sus hogares", según ha informado la agencia iraní de noticias Mehr.
Soleimani fue una de las víctimas de un ataque con drones que llevó al Parlamento de Irak a exigir la salida de las tropas internacionales del país perpetrado por Estados Unidos en enero de 2020, entre las que figuró también Abú Mahdi al Muhandis, entonces 'número dos' de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP) una coalición de milicias progubernamentales iraquíes apoyadas por Irán.