Corea del Norte celebró el lanzamiento de prueba de su nuevo misil intercontinental, el Hwasong-17.
Los medios norcoreanos confirmaron que el régimen lanzó este nuevo artefacto que llegó a puntos no logradas anteriormente por ningún otro artefacto de destrucción coreano.
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Como muestra de su poderío, esta arma fue lanzada desde el aeropuerto internacional de Piongyang.
Ascendió a una altura máxima de 6.248,5 kilómetros, voló mil 090 kilómetros durante 4.052 segundos, finalmente aterrizó en aguas de alta mar en el Este de Corea.
Kim Jong festeja la muestra de su poderío
Durante el ensayo de esta arma, el líder Kim Jong-un festejó su eficacia, encementando la tensión en la región.
Lo anterior, luego de que Corea del Norte rompió el plan que se autoimpuso en 2018 para tratar de lograr un clima de entendimiento diplomático con EU.
“El lanzamiento de prueba del misil balístico intercontinental se llevó a cabo mediante el procedimiento de lanzar en ángulo abierto teniendo en cuenta la seguridad de los países vecinos”.
El Hwasong-17 se lanzó en un ángulo cercano a los 90 grados para trazar una parábola muy pronunciada, cayó en aguas japonesas a solo 150 kilómetros al oeste de la isla de Hokkaido,.
Siendo así el proyectil norcoreano que más cerca ha caído de las costas niponas.
Este ensayo forma parte del plan quinquenal de modernización armamentística, que han incluido alrededor de 12 ensayos desde que comenzó el año.
Asimismo, ha rechazado invitaciones estadounidenses al diálogo en un momento en el que el país sigue cerrado a cal y canto por la pandemia y sin vacunas, lo que hace poco factible la celebración de encuentros diplomáticos de alto nivel.
¿Estará enviando Corea del Norte un mensaje para mostrar su poderío con el lanzamiento de este nuevo misil intercontinental?