El rey Carlos III informó mediante una carta enviada por el Palacio de Buckingham al grupo de defensa de los derechos de los animales PETA, que las residencias de la Casa Real británica no ofrecerán “foie gras” a los comensales.
En esa misiva, Buckingham señala que el manjar, el cual está hecho a partir del hígado hipertrofiado del pato o el ganso, no se compra ni se sirve en los palacios de la monarquía."No hay planes para que cambie esta política", señala la carta, según el diario "Daily Telegraph".
La alimentación de la realeza
El nuevo rey Carlos III (que sucedió a la difunta Isabel II tras su muerte el pasado 8 de septiembre) se ha destacado a lo largo de su vida por el compromiso con el medioambiente y su oposición al consumo de “foie gras” debido al sufrimiento animal que implica su elaboración.
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Según recuerda la BBC, cuando Carlos era todavía príncipe de Gales vetó el uso de "foie gras" en sus propiedades, un enfoque que ha trasladado a las residencias reales una vez proclamado soberano.
La carta recibida por PETA confirma que el consumo de "foie gras" está prohibido en los diferentes palacios de la monarquía, incluidos los de Buckingham, Balmoral, Windsor y Sandringham.
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¿Cómo se prepara el foie gras?
Se puede traducir como hígado graso y tal cual, se trata de este órgano de un pato cebado por sonda (alimentación forzada con maíz), aunque fuera de Francia—lugar de origen— en ocasiones se produce mediante la alimentación natural.
¡Precaución! El siguiente video contiene imágenes sensibles que pueden herir la susceptibilidad del público.
De cualquier forma que se llegue a preparar, se basa en el sufrimiento animal, ya que se le provoca hipertrofia al hígado del pato o ganso para que tenga un mejor sabor, aunque este sea un órgano enfermo.
Por ello, es que en muchos países está prohibido, tal es el caso de Reino Unido, donde el monarca Carlos III pone el ejemplo de dejar de consumir este alimento en pro de los derechos de los animales.