Este fin de semana, el gobierno de China concretó la entrega de un estadio de lujo a Camboya.
El recinto, bautizado como Estadio Nacional Morodok Techo, se ubica en la ciudad de Phnom Penh, cuenta con capacidad para 60 mil personas.
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Este proyecto comenzó a construirse en 2013 y costó cerca de 150 millones de dólares.
Aunque el gobierno de China aseguró que la intención de construir este estado es fomentar el deporte y llevarlo a otro nivel en Camboya, en realidad tiene una doble intención.
¿Por qué China regaló un estadio a Camboya?
Este millonario regalo de China para Camboya forma parte de la iniciativa Nuevas Rutas de la Seda (Belt and Road Initiative).
Este proyecto cuenta con un fondo de inversión de más de un billón de dólares que China repartirá en distintos países del extranjero.
Se trata principalmente de naciones pobres o en vías de desarrollo, las cuales necesitan apoyo para superar desafíos que les permitan seguir avanzando.
En estos territorios, el gobierno planea invertir en infraestructura que dé alternativas a los gobiernos para encontrar nuevas rutas de crecimiento.
Con esto, China busca plantar semillas de influencia que le permita tener aliados estratégicos y un mayor poder en zonas estratégicas.
Wang Yi, ministro de Relaciones Exteriores chino, asistió el pasado fin de semana a la inauguración del estadio.
Aprovechó la visita a Camboya para firmar con aquél país una serie de contratos que, en conjunto, suman cerca de 250 millones de dólares en inversión para proyectos de desarrollo social.
Pese a ello, el ministro chino aseguró que su país no impondrá "condiciones políticas" en sus labores de apoyo a otras naciones.
Datos sobre el estadio
El Estadio Nacional Morodok Techno tiene forma de un barco de vela.
Este es in símbolo que representa la amistad entre China y Camboya, ya que era el medio de transporte que utilizaban hace años para hacer visitas de un país a otro.
El recinto deportivo será sede de los Juegos del Sudeste Asiático de 2023, los cuales se espera que sirvan para inyectar más inversión.
El estadio que China regaló a Camboya, además de futbol, traerá a ambos países una relación aún más cercana y estratégica.