Celular explota dentro de la cabina de un avión de Alaska Airlines y los pasajeros se llevan un buen susto.
Afortunadamente, el avión se encontraba en tierra tras realizar la ruta Seattle a Nueva Orleans, por lo que los pasajeros tuvieron que ser evacuados.
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Pese a que el avión ya había aterrizado cuando sucedió el percance, los pasajeros pasaron momentos de incertidumbre.
De acuerdo con el diario The Seattle Times, se trata de un teléfono Samsung Galaxy A21, según relató el dueño del mismo.
EL CELULAR SE QUEMÓ HASTA QUEDAR IRRECONOCIBLE
Un portavoz del aeropuerto de Nueva Orleans, señaló que el teléfono móvil se había quemado hasta quedar irreconocible.
Dijo también que el pasajero y dueño del teléfono dijo a los oficiales de la terminal aérea que se trataba de esa marca, el cual se quemó hasta quedar en restos.
El sitio especializado The Verge, dijo que un portavoz de Alaska Airlines explicó que la tripulación del avión utilizó extintores y una bolsa para evitar que la batería fuera a echar mucho humo.
Ante ello, los pasajeros del avión fueron desalojados mediante rampas de evacuación por la cantidad de humo que había dentro de la cabina.
Ningún pasajero resultó lesionado y el desalojo de los pasajeros se realizó sin ningún contratiempo tras el incidente.
BATERÍAS DEL GALAXY NOTE 7 SE INCENDIABAN
Este hecho trae a la memoria la situación que se vivió con el modelo Galaxy Note 7 de Samsung cuyas baterías se incendiaban y que provocaron varios incidentes.
Ante ello la marca coreana decidió retirarlos del mercado ante el potencial riesgo que representaban a los usuarios.
Afortunadamente, en el caso del vuelo de Seattle a Nueva Orleans, el celular explota cuando el avión se encontraba en tierra y sin que hubiera lesionados.