El presidente iraní, Hasan Rohaní, aseguró que “los principales problemas con EU se han resuelto” en las negociaciones de Viena para revivir el acuerdo nuclear de 2015, mostrándose optimista sobre el resultado de las mismas.
Las conversaciones, cuya quinta ronda comenzó la semana pasada, buscan que EU levante las sanciones contra Irán y regrese al pacto, que abandonó en 2018, y que Teherán vuelva a cumplir con todas sus obligaciones nucleares.
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“Hoy, gracias a Dios, nosotros vemos que nuestros principales problemas con EU en estas negociaciones se han resuelto. Quedan unos cuantos temas que estamos negociando y alcanzaremos un resultado”, dijo Rohaní en su discurso durante la reunión semanal del gabinete.
El mandatario indicó que su Gobierno ya “ha hecho y acabado” su trabajo al respecto y se ha mantenido “fiel a la promesa” de eliminar las sanciones estadounidenses contra la nación persa. En este sentido, añadió que, “si hay voluntad”, la solución al contencioso nuclear se hará durante su mandato, que acaba el próximo agosto, dando a entender que esperan la aprobación final del liderazgo del sistema.
Negociaciones en Viena
“El hecho de que las negociaciones en Viena vayan bien se debe a la paciencia de la gente, a la mediación del Gobierno y a la guías del líder supremo, Alí Jameneí. Hemos pagado un precio muy alto por estas victorias”, subrayó Rohaní. También denunció que “los estadounidenses buscaban derrocar al régimen iraní con sanciones y guerra económica y lo declararon abiertamente”. “No pudieron hacer nada y buscaron ellos mismos negociaciones (…) ¿Eso no significa el fracaso de EU?”, apuntó el presidente.
Irán y las delegaciones de los cinco países restantes en el acuerdo nuclear –Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania– comenzaron a principios de abril una nueva etapa de negociaciones, en las que EU asiste de modo indirecto.
EU y el pacto nuclear
El nuevo presidente estadounidense demócrata, Joe Biden, quiere volver al pacto pero exige para ello que Irán cumpla primero sus compromisos nucleares, mientras que Teherán pone como condición la eliminación de las sanciones.
El principal negociador iraní y viceministro de Exteriores, Abás Araqchí, expresó sus dudas de que se logre una conclusión en la actual ronda de conversaciones, que calificó de “muy complejas”. “Todavía no estoy seguro de que las negociaciones terminen en esta ronda. Es posible que las delegaciones deban regresar a sus países para realizar más consultas”, apuntó Araqchí, quien reconoció, no obstante, importantes avances.
El histórico acuerdo nuclear de 2015 limita el programa atómico iraní a cambio del levantamiento de las sanciones con el objetivo de evitar que la República Islámica se haga con bombas nucleares.