Un juez de la corte suprema de Brasil liberó este viernes la difusión del video de una reunión ministerial dirigida por el presidente Jair Bolsonaro en la cual se evocan en términos poco amenos los principales temas del momento, como la pandemia de coronavirus.
En el video, Bolsonaro califica de “bosta” al gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, y de “estiércol” al de Río de Janeiro, Wilson Wietzel, por impulsar medidas de confinamiento social que a ojos del mandatario ultraderechista limitan las libertades y son ruinosas para la economía.
El mismo juez del Supremo Tribunal Federal (STF), Celso de Mello, generó por otro lado una virulenta reacción del gobierno al transmitir un pedido de aprehensión del celular de Bolsonaro.
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Una decisión que, de ser aceptada por el fiscal general, tendría “consecuencias imprevisibles” y comprometería la “estabilidad”, según el jefe del Gabinete de Seguridad Nacional (GSI), el general Augusto Heleno.
Tanto el pedido de aprehensión del celular, presentado por partidos de la oposición, como la liberación del video de la reunión ministerial del 22 de abril se inscriben en la investigación abierta después que el ministro de Justicia Sergio Moro renunciara al cargo, alegando que el mandatario ultraderechista había tratado de interferir en investigaciones policiales para proteger a familiares y amigos.
Bolsonaro asegura que la grabación no lo incrimina. A pesar de admitir que en la reunión se refirió a amigos y familiares, alega que estaba hablando de su seguridad personal y no de blindarlos ante investigaciones de la policía federal (PF).
En el video, que las televisiones brasileñas pasaban una y otra vez por la noche, con fondo de cacerolazos de protesta en varias ciudades, se le oye decir: “¡Ya traté de cambiar a personas de nuestra seguridad en Río de Janeiro, oficialmente, y no lo conseguí! No voy a esperar a que jodan a toda mi familia, a mis amigos, porque no puedo cambiar a alguien de la seguridad en la punta de la línea de nuestra estructura”.
“Otra farsa cayó. No hay un segundo en el video en que alguien pueda sospechar que interferí en la PF”, declaró Bolsonaro tras la difusión del video, del que solo se excluyeron pasajes con referencias a países extranjeros.