Teresa Romero, presidenta de la Unión de Campesinos de Estados Unidos, convocó a los gobiernos de México y Norteamérica a realizar esfuerzos conjuntos para que los trabajadores agrícolas obtengan el respeto a sus derechos laborales más elementales.
Al participar en el Conversatorio organizado por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), la sucesora del luchador sindicalista César Chávez, dijo que a 60 años de iniciada esta pelea por el respeto de los derechos laborales de los jornaleros agrícolas inmigrantes, aún los agricultores siguen siendo invisibles para los consumidores y empresas en ambos países.
Explicó que en el caso de los trabajadores de la industria de la leche en Estados Unidos, existe un retroceso porque no se respeta ni siquiera el derecho a tomar agua y algunos trabajadores mueren ahogados en lagunas de estiércol sin que nadie haga nada.
Por su parte, Alexandra Haas Paciuc, titular del Conapred apuntó que los jornaleros agrícolas mexicanos en Norteamérica, han logrado avances importantes en cuanto a sus derechos laborales y agregó que en México el 5% de población, es decir, 6 millones son jornaleros.
De éstos, solo 3 de cada 100 personas tienen un contrato formal de trabajo y de cada 100, 34 no recibe ningún ingreso, solo pago en especie, solo 4 de cada 100 accesan a servicios de salud, con condiciones de movilidad inadecuadas y condiciones laborales inmensamente precarias. Se considera dijo la titular del Conapred que un cuarto de jornaleros son migrantes, es decir el 25% y el 24% habla lengua indígena.
En este evento también estuvo presente Mayela Blanco, representante de la Red Nacional de Jornaleros y Jornaleras Agrícolas quien evidenció que el desplazamiento causado por la violencia en el país ha generado mayores abusos contra los jornaleros mexicanos.