Una corte de Nueva Zelanda present\u00f3 este lunes cargos contra las seis personas que difundieron el video en vivo que transmiti\u00f3 el autor del ataque armado del mes pasado en la ciudad Christchurch, la mayor ciudad de la Isla Sur del pa\u00eds, que dej\u00f3 50 muertos y 48 heridos.
Los acusados, entre ellos el empresario Philip Arps, director de Beneficial Insulation, y un joven de 18 a\u00f1os detenidos en marzo, comparecieron ante el juez del Tribunal de distrito de Christchurch, Stephen O’Driscoll, quien ley\u00f3 los cargos en su contra y les neg\u00f3 el derecho fianza.
El empresario de 44 a\u00f1os, est\u00e1 acusado de suministrar o distribuir material objetable, por lo que debe comparecer de nuevo ante la Corte el pr\u00f3ximo 26 de abril para explicar el por qu\u00e9 comparti\u00f3 el enlace del video difundido por Brenton Harrison Tarrant, quien enfrenta 50 cargos de asesinato y 39 por intento de asesinato.
Harrinson transmiti\u00f3 en directo en Facebook durante 17 minutos la matanza que perpetr\u00f3, material en el cual se pudo ver c\u00f3mo dispar\u00f3 a bocajarro contra numerosas personas y cuando cambi\u00f3 el menos dos veces de cargador para continuar con la masacre.
En tanto, el sospechoso de 18 a\u00f1os, quien est\u00e1 acusado de compartir el video en vivo y una imagen fija de la mezquita de Al Noor con las palabras “objetivo adquirido”, reaparecer\u00e1 ante el tribunal el 31 de julio, seg\u00fan un reporte de la edici\u00f3n electr\u00f3nica del diario Herald NZ.
De acuerdo con el reporte, el fiscal de la polic\u00eda, Pip Currie, se opuso a la fianza para el joven sospechoso por una segunda acusaci\u00f3n que pesa en su contra, relacionada con las palabras que agreg\u00f3 a la imagen, la cual calific\u00f3 como \u201cuna preocupaci\u00f3n importante\u201d.
El juez O’Driscoll inform\u00f3 que las otras cuatro personas han recibido amenazas de muerte, por lo que no ser\u00e1n revelados detalles sobre su identidad, ni las fechas en las que est\u00e1n llamadas a comparecer de nuevo ante la justicia.