La declaraci\ón de culpabilidad de este martes contra Joaqu\ín “el Chapo” Guzm\án por parte de un jurado en Nueva York no aumentar\á la ya acentuada violencia ni las organizaciones criminales en M\éxico se ver\án afectadas, dijeron analistas.
Procesado por narcotr\áfico, El Chapo fue declarado culpable de diez cargos tras unos tres meses de proceso contra \él como responsable del c\ártel de Sinaloa, y podr\ía ser condenado a cadena perpetua.
Pese a que el caso ha despertado una fuerte atenci\ón medi\ática por la figura que representa El Chapo -quien logr\ó fugarse en dos ocasiones de penales mexicanos-, la realidad es que no se espera un ba\ño de sangre tras esta (un tanto esperada) decisi\ón judicial.
Declaran culpable a El Chapo Guzm\án por narcotr\áfico pic.twitter.com/9YVZTrKiNR
\u2014 Noticias MVS (@NoticiasMVS) 12 de febrero de 2019
De facto, el temible capo llevaba sin tener una verdadero control del c\ártel de Sinaloa desde hac\ía varios a\ños.
En julio de 2015 protagoniz\ó una fuga de pel\ícula a trav\és de un t\únel en el penal del Altiplano que, pese a concederle la libertad, le oblig\ó a vivir pr\ácticamente en la sombra y a limitar sus movimientos.
Fue atrapado de nuevo unos meses despu\és y, finalmente, extraditado a Estados Unidos en enero de 2017, desconect\ándolo definitivamente de las redes criminales mexicanas.
“Estrictamente, Guzm\án ten\ía a\ños de no poder operar perseguido por el Gobierno y por sus enemigos. Su sentencia no va a tener mayores consecuencias en las organizaciones criminales”, dijo este martes a Efe el especialista en seguridad nacional Javier Oliva, acad\émico de la Universidad Nacional Aut\ónoma de M\éxico (UNAM).
El veredicto, que llega tras 56 testimonios, no ha de cambiar tampoco la estructura del c\ártel de Sinaloa, que sigue siendo uno de los m\ás poderosos del pa\ís y ha padecido duros choques de otras organizaciones criminales, como el C\ártel Jalisco Nueva Generaci\ón (CJNG).
Para el analista de seguridad Alejandro Hope, el capo ya no era una “factor de violencia” en el pa\ís y tampoco ostentaba control en esta organizaci\ón criminal.
Explic\ó que el c\ártel de Sinaloa actualmente est\á muy fragmentado y regentado por distintas personas, entre ellas dos hijos del Chapo, pero tambi\én el hist\órico Ismael “el Mayo” Zambada.
El c\ártel “sigue siendo uno de los m\ás importantes del pa\ís”, aunque definir su tama\ño es complicado, apunt\ó el especialista.
De esta manera, la sentencia contra el Chapo de poco habr\á de servir para bajar los elevados niveles de violencia que padece M\éxico, sumido en una ola criminal sin precedentes.
Seg\ún cifra oficiales, el n\úmero de asesinatos ascendi\ó a 33.341 v\íctimas en 2018, 15,5 % m\ás que en 2017, lo que supuso un r\écord desde que se tiene registro.
Samuel Gonz\ález, analista de seguridad y abogado, descart\ó tambi\én una “reestructuraci\ón” de los c\árteles y una disminuci\ón de los \índices de violencia.
“Carecemos de seguridad porque no hay un aplicaci\ón de la ley, ni una actuaci\ón correcta de las leyes (…). Tenemos jueces en M\éxico que han sido mal capacitados en delincuencia organizada”, apunt\ó.
Incrustado en el imaginario popular de millones de personas y protagonista de canciones y series televisivas, queda por responder esta pregunta: \¿Qu\é mensaje da a la ciudadan\ía mexicana el fin de las fechor\ías del capo?
“Para la sociedad ejemplifica las fallas tremendas de la justicia, que en M\éxico no alcanz\ó a juzgarlo, pues nunca tuvo una sentencia”, opin\ó Gonz\ález.
Algo m\ás positivo, Hope agreg\ó: “Esto cierra un cap\ítulo para M\éxico, y creo que en algunos sectores tal vez haya un suspiro de alivio porque este hombre culmina su carrera criminal”.
Tras el veredicto, Guzm\án, de 61 a\ños, se enfrenta ahora a una posible cadena perpetua que le llevar\ía a pasar el resto de sus d\ías entre rejas.