Un estudiante de preparatoria armado con un cuchillo en Wisconsin, Estados Unidos, fue herido por un policía sin causarle lesiones mortales.
El hecho violento ocurrió en la preparatoria de Oshkosh West, cuando un joven de 16 años armado con un arma punzocortante apuñaló a un policía de la escuela, quien detonó en defensa su pistola de 9 milímetros.
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Ambos fueron trasladado a hospitales sin que las lesiones pusieran en riesgo sus signos vitales, informó Dean Smith, jefe del departamento de policía de Oshkosh.
Tras el ataque, la escuela implementó el protocolo de seguridad entre sus mil 700 estudiantes y suspendió las clases para mañana miércoles. La división de investigación criminal de Wisconsin inició las indagatorias para deslindar responsabilidades, agregó Smith.
El evento de Oshkosh sucede un día después de que un policía de Waukesha, también en Wisconsin, disparó contra un joven de 17 años que apuntaba con un arma contra fuerzas de seguridad que trataban de convencerlo de soltar el arma, según recuento del New York Times.
Más adelante, ese mismo lunes un estudiante armado de 15 años recorría la preparatoria de Waukesha North, la cual fue cerrada para facilitar maniobras de la policía, que consideró que el joven armado ya no pertenecía a la escuela. El sospechoso fue arrestado en su hogar.
Tony Evers, gobernador de Wisconsin por el Partido Demócrata, aseguró que los eventos de Oshkosh perturbaron íntimamente a su familia porque dos de sus hijos se graduaron de la escuela de Oshkosh West.
"Es imposible ignorar el hecho de que, además del tiroteo de un policía en Oshkosh West, el Sparta School District está cerrado debido a amenazas de seguridad, y de que esto sucede sólo un día después de que tuvimos otro tiroteo escolar en Waukesha South", escribió el mandatario estatal en Twitter.
"Ningún niño debe tener miedo de ir a la escuela o estar en un salón de clases, así como ningún padre debería tampoco temer enviar sus hijos a la escuela".
Agregó que no se puede aceptar la violencia en las escuelas como una conclusión inevitable, por lo que deben trabajar en hacer todo lo posible para asegurar el bienestar de los niños y sus comunidades.