Los primeros detenidos por la ley anti-máscaras decretada en Hong Kong fueron presentados este lunes ante una corte de Justicia, luego de un violento fin de semana de disturbios que vio sangrientos enfrentamientos con la policía.
Scores arrested in #HongKong as protests persist over face mask ban pic.twitter.com/0J4LWFYATt
— RT (@RT_com) October 7, 2019
La mañana de este lunes, un estudiante universitario y una mujer de 38 años de edad fueron las primeras dos personas acusadas de usar ilegalmente una máscara mientras los partidarios abarrotaban la sala del tribunal, muchos de ellos con disfraces, destacó Channel News Asia.
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Ambos fueron acusados de reunión ilegal, que conlleva hasta tres años de cárcel, y de desafiar la prohibición de la máscara, que tiene una pena máxima de un año. Los dos fueron puestos en libertad más tarde bajo fianza.
Fuera de la corte, los manifestantes hicieron cola para entrar, algunos gritaban consignas como “Usar una máscara no es un delito” y “La ley es injusta”.
Las detenciones se dieron luego de que jefa del Ejecutivo de Hong Kong, Carrie Lam, tomó la decisión de imponer la prohibición invocando una ley de la era colonial por primera vez en más de medio siglo.
#05Oct miles de manifestantes enmascarados salieron a las calles de Hong Kong para mostrar su rechazo a las medidas impuestas por la Jefa del Ejecutivo, Carrie Lam, que prohíbe el uso de máscaras durante las protestas pic.twitter.com/BXZ1M5eJ9T
— VPItv (@VPITV) October 5, 2019
Según Lam, la ley solo busca identificar a los más violentos, pero muchos en la ciudad temen que el Gobierno acabe invocando la mencionada ordenanza para pedir la potestad de autorizar detenciones, censurar a la prensa o cambiar leyes.
El pasado fin de semana Hong Kong registró un violento fin de semana de disturbios que vio sangrientos enfrentamientos con la policía y vandalismo generalizado que paralizó la red de trenes de la ciudad.
Las manifestaciones comenzaron el 9 de junio en oposición a un proyecto de ley que permitiría las extradiciones a China, pero el movimiento se transformó en una denuncia por el recorte de libertades y la falta de reformas democráticas, en el mayor desafío de la excolonia británica desde la Revolución de los Paraguas de 2014.
A pesar de que la jefa del ejecutivo de Hong Kong retiró el 4 de septiembre el proyecto de ley, los manifestantes mantienen las movilizaciones, exigiendo amnistiar a los detenidos durante las protestas, iniciar una investigación independiente sobre el excesivo uso de la fuerza policial y relanzar reformas políticas.