La actual crisis económica argentina la provocó un modelo basado en el endeudamiento que sumió en la fragilidad al sistema financiero y terminó generando desconfianza hacia el presidente Mauricio Macri y su gobierno, consideraron hoy analistas del sector y periodistas.
La exdirectora de la carrera de Economía en la Universidad de General Sarmient, Mercedes D’Alessandro, y la periodista Estefanía Pozzo, experta en temas económicos, coincidieron en que decisiones como tratar a toda costa de disminuir el déficit fiscal y liberalizar y desregular por completo el mercado financiero no funcionan y solo generan incertidumbre.
“Este plan no viene funcionando desde el principio. Argentina sólo aumentó sus niveles de deuda y la economía pasó de proyecciones de crecimiento a principios de este año, a un escenario de recesión de 1.0%, si no es que va a seguir cayendo”, dijo D´Alessandro a Notimex.
Sostuvo que el gobierno macrista consiguió financiamiento que sólo se usó para pagar deuda y no para proyectos productivos.
La coordinadora del portal de divulgación “Economía Feminista” agregó que otro plan del gobierno era bajar la inflación, pero jamás acertó a sus previsiones anuales, tanto, que para 2018 la inflación será superior a 30%, el doble de la que había anunciado el gabinete económico.
También precisó que otro de los errores fue la emisión de las Letras del Banco Central (Lebac) que funcionaron a expensas de un debilitamiento de la economía porque disminuyeron la inversión productiva y alimentaron la especulación financiera.
“Las Lebac hicieron más frágil a la economía porque, ante una mejor opción, el especulador se va. Es lo que pasó cuando Estados Unidos aumentó sus tasas de interés. Si tienes plata extra, en vez de ponerla en Argentina con rendimiento en pesos, te vas a Estados Unidos con rendimiento en dólares”, señaló.
D’Alessandro advirtió que todos los economistas sabían que con la recuperación económica, el gobierno de Donald Trump aumentaría las tasas de interés, que es el indicador de referencia en todo el mundo.
“El equipo técnico del Banco Central (de Argentina) no estuvo a la altura de prever esta situación para blindar un poco el esquema financiero de Argentina, es lo que muchos sectores reclaman, no hicieron ningún tipo de control para que aquellos que entraron con Lebac no pudieran salir”, afirmó.
Todo lo que está pasando, advirtió, incluida la devaluación del 100% en un año, la crisis cambiaria de los últimos meses, la inflación y la recesión, se debe a “las malas políticas y malas prácticas” del gabinete económico macrista.
Consideró que la falta de confianza hacia el gobierno, que se reflejó esta semana con una nueva y acelerada devaluación, se debe a los nulos resultados en materia económica y a los problemas que generará el préstamo de 50 mil millones de dólares que Macri le pidió al Fondo Monetario Internacional (FMI).
“La llamada al FMI sonó, incluso para muchos que son cercanos al gobierno, como algo innecesario. Si mañana un ministro quiere imponer control de capitales, volver a un esquema de retenciones al campo o incrementar transferencias a provincias, lo va a tener que aprobar Christine Lagarde (directora del Fondo)”, explicó.
Por su parte, Estefanía Pozzo afirmó que la crisis se debe a que el gobierno minimizó la importancia del déficit de cuenta corriente del país, lo que se profundizó con su decisión de liberalizar y desregular completamente el mercado financiero.
“Un buen ejemplo de esto último es la decisión del Banco Central de quitar todas las restricciones o plazos de permanencia de capitales, lo que atrajo la inversión golondrina de capitales por las tasas altísimas”, recordó.
Además, dijo, “esto se complementó con una bola de nieve por la emisión de Letras del Banco Central (las famosas Lebac), el instrumento que atrajo esos capitales golondrina y que el Central utilizó para controlar la inflación, con metas fijadas de manera rígida y muy aceleradas de descenso de los precios”.
Con respecto a la desconfianza que hay hacia Macri, Pozzo comentó que se debe a que “el mercado siempre pide más” y durante dos años le prestaron dinero al gobierno porque prometía avanzar hacia el equilibrio fiscal, “pero el ajuste no se hizo en el tiempo que le pedían”.
Más tarde, añadió, se sumó “la falta de una estrategia clara en la conducción de la crisis. Intentaron fortalecer a un ministro para que hubiera interlocutores fuertes, pero el mercado apunta cada vez con más fuerza a Marcos Peña y sus laderos en la Jefatura de Gabinete como los responsables de los errores que se cometieron”.