Japón venció 2-1 a Colombia, convirtiéndose en el primer equipo asiático que vence a un sudamericano en la historia de los Mundiales, sin embargo, el acto más destacado se presentó al finalizar el enfrentamiento, pues los presentes palidecieron con el comportamiento de la afición nipona en la grada del Estadio de San Petersburgo.
Al finalizar el partido, cuando bien podrían estar festejando una de las más grandes victorias de la historia futbolística de su selección, varios aficionados sacaron de sus asientos bolsas de plástico gigantes y comenzaron a depositar la basura regada en el sector de la arena en donde presenciaron el partido, mostrando un maravilloso ejemplo mundialista.
Con información de Marca Claro