El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, viajó este miércoles a Nueva York para reunirse con el vicepresidente de Corea del Norte, Kim Yong Chol, con el fin de seguir los preparativos de la cumbre entre el presidente, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong–un.
La portavoz del Departamento de Estadom Heather Nauert, informó en un breve comunicado que Pompeo permanecerá en Nueva York hoy y mañana jueves para reunirse con Kim Yong Chol y hablar “de los preparativos de la esperada cumbre entre el presidente Trump con el líder Kim Jong-un en Singapur”.
La visita del estrecho colaborador de Kim a Nueva York supone la presencia del político de mayor rango de Corea del Norte en los Estados Unidos en casi dos décadas.
Dentro de estos preparativos para la cumbre en Singapur el 12 de junio, Trump también se reunirá en la Casa Blanca el próximo día 7, cuatro días antes de ese encuentro y en vísperas de la cumbre del G7 en Canadá, con el primer ministro japonés, Shinzo Abe.
La portavoz del presiente Trump, Sarah Sanders, aseguró este martes que desde la carta que el gobernante envió el 24 de mayo al líder norcoreano Kim Jong-un, “los norcoreanos han estado implicados” en los preparativos de la cumbre.
“Estados Unidos continúa la activa preparación de la esperada cumbre del presidente Trump con el líder Kim en Singapur”, agregó Sanders.
Así mismo, como parte de estos preparativos, “una delegación estadunidense se encuentra reuniéndose con una delegación norcoreana en la zona desmilitarizada entre las dos Coreas (DMZ, en inglés), compuesta por Sung Kim, el embajador estadounidense en Filipinas; Allison Hooker, la directora para Corea del Consejo de Seguridad Nacional; y por Randy Schriver, secretario asistente de Defensa para Asia y el Pacífico”, agregó.
De celebrarse la cumbre entre Trump y Kim, la reunión supondría el primer encuentro en la historia de mandatarios de Estados Unidos y Corea del Norte tras casi 70 años de confrontación iniciados con la Guerra de Corea (1950-1953) y de 25 años de negociaciones fallidas a cuenta del programa atómico de Pyongyang.