Los 60 diplomáticos estadunidenses expulsados por Rusia en respuesta a una medida similar por parte de Washington a raíz del caso del ex espía Serguei Skripal, dejaron este jueves su embajada en Moscú para volver a Estados Unidos, en el último día de plazo para que salieran del país.
Los diplomáticos, declarados personas no gratas, así como sus familias abandonaron esta madrugada el edificio de la embajada estadunidense, ubicado en el centro de Moscú, a bordo de tres autobuses y un minibús en dirección a un aeropuerto de la capital rusa, según las agencias de noticias Sputnik e Itar-Tass.
Hace una semana Rusia expulsó a 60 diplomáticos estadunidenses y ordenó el cierre del consulado en San Petersburgo en represalia por la expulsión de Washington del mismo número de diplomáticos rusos y el cierre del consulado ruso en Seattle.
Reino Unido responsabilizó a Rusia del envenenamiento de Skripal con un agente nervioso de la era soviética, pero sin mostrar pruebas, además en represalia expulsó a 23 diplomáticos rusos y la cancelación de todos los contactos de alto nivel entre ambos países.
Rusia, que rechaza las acusaciones, solicitó este jueves una sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para esclarecer el caso Skripal, un día después de que no logró el apoyo de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) para participar en la investigación del envenenamiento del ex espía.
Por petición del gobierno de Rusia, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sesionará este jueves a las 15:00 hora local, informó el embajador ruso ante la organización, Vasili Nebenzia, quien agregó que la cita se centrará en la carta de la primera ministra británica, Theresa May, acusando a Moscú.
Este jueves, Viktoria Skripal, prima de Yulia, indicó que ha hablado por teléfono con ella y le aseguró que se encontraba bien, según la agencia rusa de noticias Interfax.
Declaró que quiere viajar a Reino Unido para trasladar a su prima Yulia a Rusia. “De momento tengo un solo objetivo: viajar allí y llevarme a Yulia a Rusia, por lo menos a Yulia, porque con Serguei todo es mucho más complicado”.
La víspera, la vocera de la cancillería rusa, María Zajarova, expresó su esperanza de que la embajada británica en Moscú conceda cuanto antes el visado a Viktoria, ya que “se trata de una situación humanitaria”.