El gobierno sirio aseguró este viernes en la ONU que más de 40 mil civiles salieron este jueves de Guta Oriental, el principal bastión opositor a las afueras de Damasco.
La evacuación, según explicó el embajador sirio ante la ONU, Bashar Yafari, se llevó a cabo a través de un corredor abierto por las autoridades sirias y estuvo coordinada por el gobierno y la Media Luna Roja.
Yafari acusó a grupos rebeldes de haber estado usando a los civiles como “escudos humanos” y dijo que aún están impidiendo a muchos utilizar los corredores abiertos para salir de la zona.
El diplomático defendió que su país está asumiendo una “enorme responsabilidad” para hacer cumplir con los llamamientos del Consejo de Seguridad de la ONU y aliviar el sufrimiento de los civiles.
Lo hizo en un discurso ante el propio Consejo de Seguridad, que hoy analiza la situación en Siria.
El mediador de Naciones Unidas para el conflicto, Staffan de Mistura, reiteró que la organización no está participando en este proceso de evacuaciones, por lo que no tiene información de primera mano.
De Mistura recalcó que, cualquier desplazamiento de civiles, debe hacerse en pleno respeto de la ley internacional y asegurando que puedan ir a donde ellos mismos decidan.
El diplomático, por videoconferencia desde Bruselas, dijo al Consejo que el alto el fuego pactado entre Rusia y la facción rebelde Ejército del Islam en Duma, la principal ciudad de Guta Oriental, es una “pequeña buena noticia” en un mar de dificultades.
Según De Mistura, lo que demuestra ese acuerdo, respetado en general durante los últimos días pero que no se ha reproducido en otras partes de Guta Oriental, es que si hay voluntad política pueden lograrse soluciones para aliviar la situación de los civiles.