La Comisión Electoral rusa garantizó este martes que los comicios presidenciales del próximo domingo serán libres y negó que el Kremlin haya ordenado una alta participación para legitimar la casi segura reelección de Vladímir Putin.
“Occidente puede reconocer o no las elecciones presidenciales, pero lo importante es que las reconozca nuestro pueblo”, dijo Ella Pamfílova, presidenta de la Comisión Electoral Central (CEC), en una reunión con la prensa extranjera.
En respuesta a las críticas opositoras sobre que las presidenciales son una farsa, Pamfílova desglosó las mejoras introducidas para prevenir un fraude como el que provocó en 2011 las mayores protestas antigubernamentales desde la caída de la URSS.
Destacó que habrá cámaras de vídeo en los colegios donde votará más del 80 % del electorado, es decir, unos 90 de los 110 millones llamados a las urnas, por lo que el pucherazo está “totalmente” descartado.
“El método que hemos ideado no tiene análogos en el mundo. Ya no hay zonas negras o grises en los colegios. Prácticamente, se excluye el factor humano. Puede haber provocaciones, por lo que debemos de estar preparados para cualquier contratiempo”, subrayó.
Pamfílova, la primera mujer en ser candidata a la presidencia en el año 2000, destacó que “nunca” había sido tan fácil votar, ya que los rusos pueden hacerlo en cualquier sitio, aunque no sea su lugar de empadronamiento, con mínimos trámites.
“El mayor obstáculo para unas elecciones libres en Rusia es la pereza. ¿Quieres unas elecciones libres? No seas vago. Vota. ¿No quieres votar? Vete como observador. Hemos retirado todos los obstáculos. Animamos que se denuncien las irregularidades”, dijo.
En cuanto a los niveles de participación, aseguró que la legislación no exige un mínimo para que las elecciones sean consideradas válidas y negó que el Kremlin haya presionado a la CEC al respecto.
“El Kremlin no ha ordenado que garanticemos una alta participación. Eso no es verdad”, dijo en alusión a las denuncias de que las autoridades se proponen “hinchar” el número de votantes para que nadie ponga en duda la victoria de Putin.