El indocumentado guatemalteco Manuel Orrego fue acusado este miércoles formalmente de la muerte de dos personas en un accidente automovilístico en Indiana, entre ellas el jugador de la liga profesional de futbol americano Edwin Jackson.
La fiscalía federal del Distrito Sur de Indiana informó de que Orrego, de 37 años, fue acusado de manejar ebrio cuando provocó el accidente el pasado domingo cerca de Indianápolis y de abandonar el lugar del accidente.
Según la Fiscalía, Orrego conducía la camioneta que embistió a Jackson, de 26 años, y al chófer de Uber, Jeffery Monroy, de 54, cuando ambos estaban parados en la carretera, fuera de su automóvil.
El presidente estadounidense, Donald Trump, hizo referencia este martes a la muerte de Jackson y exigió dureza contra la inmigración ilegal al considerar “vergonzoso” que un indocumentado matase al jugador de los Colts.
Trump ha vinculado en numerosas ocasiones la inmigración ilegal con el auge de la criminalidad, aunque varios estudios han demostrado que las comunidades de inmigrantes indocumentados exhiben tasas de criminalidad más bajas que los grupos nativos.
El procurador de justicia del condado de Marion, Terry Curry, calificó hoy de “inapropiado” el comentario del presidente, que, según dijo, busca “politizar la tragedia” y prometió no tener en cuenta el estatus migratorio de Orrego a la hora de procesar el caso.
Según documentos de la corte, un examen de sangre que se le realizó en un hospital arrojó un nivel de 0.19 por ciento de alcohol en la sangre, más del doble del límite legal de Indiana para conducir vehículos.
En la audiencia realizada hoy en la corte, Orrego fue ayudado por un intérprete que le explicó el procedimiento de la lectura de cargos.
Según versiones de prensa, en una audiencia previa, realizada el martes ante otro juez, el inmigrante alegó que él no manejaba la camioneta en el momento del accidente, aunque la policía no ha mencionado sobre la presencia de alguien más en el vehículo.
Asimismo, en la audiencia se informó que se le acusará de haber regresado ilegalmente dos veces a Estados Unidos, después de haber sido deportado en 2007 y 2009, lo que le agregaría diez años de prisión a una futura condena.
El abogado defensor de Orrego informó que su cliente trabaja en la construcción y ha vivido en el área de Indianápolis durante varios años.
La policía de Indianápolis informó que Orrego tenía antecedentes de una condena en 2005, por manejar ebrio en Redwood City, California, e infracciones menores y arrestos en California e Indiana.