Al menos 11 militares murieron y otros 13 resultaron heridos en un ataque suicida perpetrado hoy en el área de deportes de la Unidad del Ejército de Pakistán en Kabal, en el distrito de Swat, informaron las fuerzas armadas.
El primer ministro paquistaní Shahid Khaqan Abbasi condenó el ataque, ocurrido este sábado en el área de Shareefabad, y tras lamentar la pérdida de vidas, expresó sus condolencias a las familias en duelo y deseó la pronta recuperación de los lesionados.
Autoridades locales indicaron que los equipos de rescate llegaron al lugar y trasladaron a los heridos a un hospital en la localidad de Saidu Sharif.
El Servicio de Relaciones Interservicios (ISPR, por sus siglas en inglés) informó en un comunicado que el área fue acordonada por personal de seguridad después del ataque, y que las fuerzas armadas buscan a posibles cómplices, de acuerdo con reportes del periódico The Dawn.
El grupo Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP) se atribuyó la responsabilidad del ataque, el más importante en más de tres años.
El primer ministro Abbasi sostuvo que “el enemigo cobarde no puede luchar con los valientes soldados de Pakistán” y que este tipo de actos no disuadirán la resolución del país para eliminar el terrorismo.
A principios de diciembre, a partir de informes de inteligencia dobre la presencia de grupos armados que penetraban al valle de Swat desde Afganistán, las fuerzas de seguridad llevaron a cabo una operación en el área de Jahan Abad de Swat y mataron a dos presuntos yihadistas.
El valle de Swat, en el noroeste de Pakistán, llamado por algunos como la “Suiza de Pakistán” por sus paisajes nevados, fue controlado brevemente por los talibanes entre 2007 y 2009.
Las fuerzas armadas han llevado a cabo una serie de misiones militares contra las milicias yihadistas en la zona, con tres ofensivas bajo el nombre de Operación Rah-e-Haq entre 2007 y 2009.