La Suprema Corte de Nueva York rechazó la moción para desestimar la demanda interpuesta contra la Fundación Trump por la fiscal general del estado, lo que significa que sigue adelante este proceso legal contra el presidente Donald Trump y sus tres hijos mayores.
El juez Saliann Scarpulla anunció este viernes que puede proceder la demanda interpuesta por la fiscal general de Nueva York, Barbara Underwood, en contra de la Fundación Trump, así como de sus directores: el ahora presidente Donald Trump y sus tres hijos mayores, Eric, Don Jr. e Ivanka.
La fundación “funcionó como poco más que una chequera para servir los intereses comerciales y políticos del Trump. Hay reglas que rigen las fundaciones privadas, y tenemos la intención de hacerlas cumplir” sin importar quién las dirige, expresó Underwood en un comunicado.
Interpuesta en junio pasado, la demanda argumenta que la Fundación Trump funcionó bajo un patrón de conducta ilegal persistente, que ocurrió durante más de una década, que incluye una extensa coordinación política ilegal con la campaña presidencial del ahora mandatario.
Estas conductas violatorias de las leyes que regulan las entidades sin fines de lucro en el estado incluyeron, de acuerdo con la demanda, transacciones repetidas y deliberadas en beneficio de los intereses personales y comerciales de Trump y violaciones de obligaciones legales básicas.
En ese sentido, la fiscal general inició un procedimiento especial para disolver la Fundación Trump, así como para obtener una restitución de 2.8 millones y sanciones adicionales.
La demanda de la fiscal general también busca vetar por 10 años a Trump como director de una organización sin fines de lucro en Nueva York, e imponer vetos de un año para cada uno de los otros miembros de la junta directiva, es decir, sus tres hijos mayores.
Underwood también envió cartas de recomendación para que las autoridades federales encargadas de cobrar impuestos, así como a la Comisión Federal Electoral, identifiquen posibles violaciones a leyes federales para mayor investigación y acción legal.
De acuerdo con Underwood, la fundación utilizó los activos de la entidad caritativa para pagar obligaciones legales de Trump, para promocionar sus hoteles y otras empresas, y para comprar artículos personales.
Además, esta entidad proporcionó apoyo extenso a la campaña presidencial de 2016 utilizando el nombre de la Fundación Trump y los fondos recaudados del público para promover su campaña a la presidencia, incluso en los días previos a las primeras elecciones primarias en el estado de Iowa.