China mostró este viernes su apoyo a una eventual segunda cumbre entre el presidente estadunidense, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong-un, después de que el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, anunciase ayer que ambos mandatarios volverán a entrevistarse en 2019.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hua Chunying, indicó que China “siempre apoya los compromisos y contactos” llevados a cabo por ambos países.
“Esperamos que este compromiso de alto nivel ayude a avanzar en la mejora de la situación en la península coreana, así como a fomentar el proceso de acuerdos políticos sobre la cuestión de la península coreana”, agregó Hua.
La representante de la diplomacia china también mostró el apoyo de su país a que “las dos partes tomen medidas para implementar el consenso alcanzado entre sus dos líderes”.
Hua también respondió a otra pregunta sobre el régimen Juché, concretamente sobre la noticia publicada ayer de que Kim acudió a un lugar de pruebas militares donde se desarrolla un sistema defensivo “de última generación”, en lo que supuso la primera visita de ese tipo en un año.
La portavoz aseguró no estar al tanto de los detalles y apuntó a los “cambios positivos” registrados en la situación en la península coreana antes de desear que “se mantenga esta inercia positiva”.
La primera cumbre de Trump con Kim se celebró el 12 de junio de este año en Singapur; en ella, el líder norcoreano se comprometió a desnuclearizar el país, mientras que el presidente estadounidense le ofreció garantías de seguridad.
En declaraciones a la prensa tras reunirse ayer con el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, Pence dijo: “Creemos que la cumbre probablemente se celebrará el año próximo, pero cuándo y dónde ocurrirá aún tiene que acordarse”.
Este anuncio se produjo a pesar de las últimas informaciones de que Pyongyang tiene bases de misiles secretas.
Con respecto al papel chino en este asunto, que en ocasiones ha sido objeto de críticas por parte de Washington, el número dos del gobierno estadunidense reconoció que “China está haciendo más esfuerzos que nunca” y añadió que Trump abordará el asunto con el presidente Xi Jinping cuando ambos se reúnan en Buenos Aires a finales de este mes, en el marco de la reunión del G20.