En una decisión que refleja un giro radical en la campaña por el segundo turno de las elecciones presidenciales de Brasil, el candidato del Partido de los Trabajadores (PT), Fernando Haddad, dejará de visitar a Luiz Inacio Lula da Silva en la cárcel, como hacía semanalmente para coordinar la estrategia, anunciaron hoy fuentes de la formación.
“Tenemos poco tiempo. Son solo dos semanas más”, dijo hoy la presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, para justificar que Haddad, por detrás del ultraderecha Jair Bolsonaro en 16 puntos en la votación del domingo, no viaje más a Curitiba, la ciudad al sur del país donde el exsindicalsita está encarcelado.
“Manda a Haddad hacer campaña, no necesita venir más aquí”, dijo hoy Hoffmann, repitiendo una frase que le habría dicho Lula da Silva, quien era el candidato inicial del PT antes de ser inhabilitado a finales de agosto, a Haddad ayer durante la visita tras el primer turno.
Desde hace semanas el exalcalde de Sao Paulo y exministro de Educación viajaba los lunes a Curitiba para visitar a Lula da Silva en la cárcel en la que se encuentra desde el 7 de abril, cuando fue llevado para cumplir la condena de 12 años y un mes por lavado de dinero y corrupción.
Tras una campaña electoral de primer turno en la que el PT basó su estrategia en denunciar las “arbitrariedades” de la Justicia contra Lula da Silva, y en el lema “Lula es Haddad, Haddad es Lula”, el candidato socialista quiere ahora centrar su mensaje en la “democracia” y la defensa del modelo social basado en el estado del bienestar.
Reduciendo el uso de la imagen del expresidentes el PT pretende ganar enteros entre votantes de centro, pues la formación necesita expandir su base electoral para tratar de remontar ante Bolsonaro, quien obtuvo el 46 por ciento de los votos el domingo por 30% Haddad.