La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, emitió el discurso anual ante los miembros de su partido, el Conservador, en medio de las inciertas negociaciones para la salida de la Unión Europea (UE), conocida como Brexit, y de críticas a su liderazgo.
En la conferencia anual del Partido Conservador en la ciudad inglesa de Birmingham, la primera ministra defendió su estrategia, conocida como el Plan de Chequers, y reiteró que cumplirá con el resultado del referéndum de 2016.
“No vamos a traicionar el resultado del referéndum y no vamos a permitir que nuestro país se divida”, arremetió en medio de los aplausos de sus seguidores. Más adelante aseguró que no aceptará un mal acuerdo con Bruselas y que de ser así prefiere irse sin ningún acuerdo.
“Reino Unido no tiene miedo de salirse sin acuerdo”, afirmó la política conservadora, quien apareció en el escenario bailando al ritmo de la canción “Dancing Queen” de ABBA y reconoció que un regreso a las tarifas y a las fronteras es malo para todos.
“Debemos ser honestos, salirnos sin acuerdos e introducir tarifas y chequeos costosos en las fronteras sería un mal resultado para Reino Unido y la Unión Europea”, manifestó.
Consideró que sería “duro al principio, pero la resistencia y el ingenio de los británicos nos hará salir adelante”.
La primera ministra envió un mensaje a los detractores de su plan entre los que se encuentran euroescépticos de su propio partido, el exministro de Relaciones Exteriores, Boris Johnson, y la propia Unión Europea.
“No aceptaremos ninguna de esas opciones”, señaló en clara referencia a las contrapuestas de sus críticos. Ante el aplauso de los delegados la primera ministra pidió respeto a la UE durante las negociaciones con Bruselas.
La salida de la UE está programada para el 29 de marzo de 2019 con un periodo de transición de dos años.
El discurso de clausura de la conferencia tory se dio en momentos en que el diputado de la Cámara de los Comunes, James Duddridge, entregó este día una “carta de no confianza” a la dirección del grupo parlamentario en la que exige un cambio de liderazgo.
“Queremos una líder fuerte, que crea en Brexit y que entregue lo que el electorado pidió”, mencionó la carta. A esa petición podrían sumarse otros 50 miembros del Partido Conservador.