Al menos 259 sujetos fueron detenidos este martes en El Salvador durante un “macrooperativo” simultáneo en diferentes puntos del país, en el marco de la Operación Escudo Regional, que se realiza conjuntamente con Guatemala y Honduras, en la lucha contra las pandillas, informaron fuentes policiales.
Los detenidos serán acusados de los delitos de extorsión, homicidio agravado y atentado contra la libertad sexual, entre otros ilícitos, informó el director general de la Policía Nacional Civil (PNC), Howard Cotto.
El procedimiento, que se realizó en los departamentos de Usulután, San Miguel, San Vicente, Chalatenango y Ahuachapán, estuvo a cargo de las divisiones de investigación policial de las diferentes delegaciones, con el apoyo de efectivos de la Fuerza Armada y grupos especiales de la PNC.
Cotto señaló que “la operación ha sido orientada a golpear las estructuras de las pandillas en todo el país” y agregó que, en el marco del operativo, fue detenido uno de los principales cabecillas de la Mara Salvatrucha, identificado como Ulises Ventura y capturado en Usulután.
Respecto a la Operación Escudo, Cotto señaló que Guatemala, El Salvador y Honduras tienen acceso directo a las bases de datos para cotejar fichas de pandilleros de los países, “y se hace por medio del Centro Antipandillas Trasnacional, ubicado en El Salvador, lo que permite mayor éxito en las operaciones trasnacionales”.
Los Gobiernos del Triángulo Norte de Centroamérica lanzaron en noviembre del pasado año la Fuerza Trinacional Antipandillas, después del acuerdo alcanzado entre los presidentes los tres países.
El Triángulo Norte es una de las zonas más violentas del mundo, con las pandillas, el narcotráfico y el crimen organizado como mayores responsables. En 2015 se registraron 16 mil 527 homicidios en Honduras, El Salvador y Guatemala, donde viven 31 millones de personas, la mayoría sumida en la pobreza.
Tanto las pandillas Mara Salvatrucha (MS13) como el Barrio 18 asedian a las tres naciones y son responsabilizadas por los altos índices de homicidios.
Solo en El Salvador, las pandillas poseen más de 600 grupos desplegados por todo el territorio, a los cuales el Gobierno atribuye la mayoría de los crímenes.
Las autoridades acusan a las pandillas salvadoreñas de mantener los altos índices de asesinatos que sitúan al país como uno de los más violentos del mundo, con tasas de 103 y 81,7 asesinatos por cada 100 mil habitantes en 2015 y 2016, respectivamente.