El Papa Francisco sufrió este domingo un pequeño golpe en la ceja y el pómulo izquierdo al intentar saludar a un niño durante el recorrido en el papamóvil por el barrio de San Francisco en la ciudad colombina de Cartagena de Indias.
El pontífice se golpeó con el cristal del vehículo y una gota de sangre le manchó la esclavina o muceta.
Enseguida el comandante de la Gendarmería Vaticana, Doménico Giani le hizo una curación y Francisco siguió con sus actividades en Cartagena de Indias, la última escala de su visita de 4 días a Colombia.
“El papa está bien, se golpeó con el cristal del papamóvil, tiene un golpe encima de la ceja y en el pómulo y se le ha aplicado hielo”, dijo el portavoz vaticano, Greg Burke.
Después de la curación y de saludar en tierra a algunos fieles, Francisco abordó de nuevo el papamóvil para dirigirse a la iglesia de san Pedro Claver, en el centro histórico de Cartagena, donde orará ante las reliquias del jesuita español del siglo XVII y rezará el Ángelus.