Los servicios secretos rusos anunciaron este jueves el arresto de dos presuntos miembros de la organización yihadista Estado Islámico (EI), que se preparaban para perpetrar ataques suicidas con arma blanca el viernes en Moscú, día del inicio del curso escolar.
Según un comunicado del FSB, los dos individuos, “originarios de Asia Central”, fueron detenidos cuando planeaban “actos terroristas en lugares muy concurridos el 1 de septiembre”. Uno tenía que apuñalar civiles y el otro, hacer estallar su cinturón de explosivos, según la agencia TASS.
El 1 de septiembre es el día del inicio del curso escolar en Rusia, y normalmente padres y niños van juntos a la escuela.
El EI reivindicó en agosto dos ataques con cuchillo en Rusia. El 19 de agosto, un hombre joven apuñaló a siete personas en plena calle en Surgut, en Siberia occidental
Y, el 28 de agosto, dos hombres atacaron con un cuchillo a policías en Daguestán, en el Cáucaso Norte, una región rusa de mayoría musulmana, matando a uno e hiriendo a otro antes de ser abatidos.
Tanto sobre Surgut como por el ataque en Daguestán, las autoridades abrieron sendas investigaciones por intento de asesinato, y no por “acto terrorista”, pese a las reivindicaciones de los yihadistas del EI.