El Kremlin anunció el miércoles que la firma por parte del presidente estadounidense de la nueva batería de sanciones contra Rusia “no cambia nada”, aseguró el miércoles el portavoz oficial, Dmitri Peskov.
“De hecho, eso no cambia nada” declaró el portavoz, citado por agencias rusas. El portavoz recordó que Rusia “ya tomó medidas de represalia” ante esas sanciones adoptadas por el Congreso y ratificadas por Trump, por la presunta injerencia en la elección presidencial estadounidense.
Esas sanciones son también consecuencia de la anexión rusa de la península de Crimea y el presunto apoyo a los rebeldes prorrusos en Ucrania.
Por su parte, el ministerio ruso de Relaciones Exteriores denunció en un comunicado una “política peligrosa” por parte de Estados Unidos que “podría socavar la estabilidad [en el mundo] de la que Moscú y Washington son particularmente responsables” y advirtió que Rusia se reserva el derecho a responder a estos “actos hostiles”.
Las sanciones también afectan a Irán y Corea del Norte.
En represalia, el presidente Vladimir Putin anunció el domingo que Estados Unidos deberá recortar 755 efectivos de su personal diplomático en Rusia.