El organismo de defensa de derechos humanos Human Rights Watch (HRW) difundió este viernes un video que evidencia varios incidentes de “brutal represión” ejercida por fuerzas del gobierno de Venezuela y sus aliados contra manifestantes civiles.
El informe multimedia, de acuerdo con HRW, revela “la magnitud y brutalidad de la violenta represión de las protestas cometida por miembros de las fuerzas de seguridad venezolanas” desde que a principios de abril pasado decenas de miles de venezolanos han salido a las calles a manifestarse contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Miembros de las fuerzas de seguridad han disparado municiones antidisturbios a quemarropa contra manifestantes o los han arrollado con vehículos blindados, también han golpeado brutalmente a personas que no mostraron resistencia e irrumpido en las viviendas de presuntos opositores, según las imágenes.
Las fuerzas de seguridad también han detenido arbitrariamente a cientos de manifestantes, transeúntes y críticos, y los han llevado ante tribunales militares para juzgarlos.
“Cuando uno ve imágenes de la represión, pierde total credibilidad la versión del gobierno de que se enfrenta a una oposición violenta y golpista”, sostuvo José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW.
Vivanco añadió que “los líderes de la región deberían usar esta evidencia para enviar un mensaje categórico a las autoridades y las fuerzas de seguridad venezolanas de que estas acciones no serán toleradas y que los responsables, tarde o temprano, rendirán cuentas por sus acciones”.
El representante destacó que durante años, el presidente Maduro “ha actuado asumiendo que puede cometer abusos sin ningún tipo de control, debido a la total concentración de poder y falta de independencia judicial en el país”.
El video incluye imágenes de violaciones a los derechos humanos perpetradas por miembros de la Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional Bolivariana, así como de grupos armados partidarios del gobierno, llamados “colectivos”, que han cometido los abusos en colaboración con autoridades.
Entre los abusos destacan la brutalidad durante manifestaciones masivas contra el gobierno, que incluyen uso de municiones antidisturbios que han causado la muerte.
Asimismo, miembros de las fuerzas de seguridad también han disparado hacia manifestaciones desde techos, han arrollado a manifestantes con una tanqueta blindada y agredido a médicos y al edificio de la Cruz Roja en Caracas.
Los abusos incluyen también detenciones y juicios arbitrarios. Más de cuatro mil personas han sido detenidas desde principios de abril pasado, según el Foro Penal Venezolano, una organización sin fines de lucro, además de que la justicia militar ha procesado a más de 470 civiles.
Destaca igualmente la irrupción en viviendas, tanto de miembros de las fuerzas de seguridad como de colectivos, que han destruido automóviles, y han robado, golpeado y detenido a residentes.
Resalta además la irrupción, el 5 de julio pasado, en la Asamblea Nacional de parte de colectivos con la anuencia y coordinación de las fuerzas de seguridad.
Desde principios de abril, más de 90 personas han muerto en el contexto de manifestaciones, incluidos algunos miembros de las fuerzas de seguridad, según datos del Ministerio Público de Venezuela.
A pesar de las abrumadoras evidencias de abusos, no hay señales de que los altos mandos hayan adoptado medidas para prevenir y sancionar las violaciones de derechos, de acuerdo con HRW.
Por el contrario, algunos funcionarios han restado gravedad a los abusos o han negado lo ocurrido, en muchos casos culpando a los manifestantes por cualquier tipo de violencia, indicó el organismo.
A fines de junio pasado, Maduro declaró que su gobierno jamás se rendiría a sus opositores, y que toda derrota política futura terminaría en violencia. “Lo que no se pudo con los votos, lo haríamos con las armas”, advirtió el gobernante.