El gobierno de Venezuela rechazó las observaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a la que acusó de emitir juicios tendenciosos, carentes de objetividad y desconocer los esfuerzos del Estado venezolano por garantizar la paz, mientras aumenta la represión de las protestas que ya han dejado 80 muertos y miles de heridos.
En un comunicado difundido la noche de este jueves en Caracas, las autoridades bolivarianas rechazaron el documento de la CIDH fechado el martes pasado, por difundir sus conclusiones “sin investigar con ponderación, equilibrio y rigurosidad los hechos acontecidos” en la nación suramericana.
El comunicado de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos condenó “enérgicamente” los “operativos adelantados” por parte de los cuerpos de seguridad del Estado, mayormente por la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), en los últimos días en el país, ante la situación de violencia que se viene registrando desde el mes de abril, y que ha dejado 80 muertos, miles de heridos, y miles de personas detenidas.
En opinión del gobierno venezolano, la CIDH “desatiende su función de promoción y protección de los derechos humanos al no emitir un pronunciamiento que llame a los grupos violentos en Venezuela a deponer su actitud”.
“Reiteramos que esta deliberada omisión es una clara transgresión a la legalidad internacional que debe regir el funcionamiento de la CIDH y se constituye en un respaldo a los sectores que intentan socavar la estabilidad democrática en Venezuela a través del uso de la violencia y vandalismo generalizado”, subrayó.
“El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela respeta el derecho a la protesta pacífica y sin armas, a la libertad de expresión y reafirma su compromiso con los derechos humanos de todos quienes habitan en su Nación”, puntualizó.
En su comunicado, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos señaló que “no hay un número oficial exacto, ni información detallada oficial” sobre la identidad de las personas detenidas y su situación.
Las protestas contra el gobierno de Maduro, que comenzaron en abril pasado, ya arrojan un saldo de 80 muertos, unos dos mil heridos y cientos de detenidos.