La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó casi por unanimidad nuevas sanciones contra Corea del Norte, país comunista al cual quieren cortar las fuentes de financiamiento.
Los legisladores aprobaron por 419 votos contra uno el proyecto de ley, que aún debe ser examinado por el Senado.
“Esta ley brinda al gobierno herramientas más poderosas para cortar el financiamiento a Corea del Norte, sancionado a quienes hacen negocios con el régimen” de Kim Jong Un, declaró el republicano Ed Royce, presidente de la comisión de Relaciones Exteriores.
El texto busca transformar en ley la prohibición a los navíos norcoreanos o de otros países, que estarían violando las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, de operar en aguas estadounidenses o de atracar en alguno de sus puertos.
Los bienes producidos con mano de obra forzada además tendrían prohibido el ingreso a Estados Unidos, que a su vez podría sobre todo sancionar a los extranjeros que hagan uso de este tipo de trabajadores explotados en Corea del Norte.
“Esta ley de sanciones corta el acceso de Corea del Norte a los puertos internacionales, autoriza sanciones contra las empresas e instituciones financieras que hacen negocios con el régimen de Kim, y contra los que explotan la mano de obra forzada en Corea del Norte”, declaró Kevin McCarthy, jefe de la mayoría republicana.
El proyecto de ley requiere que el gobierno de Donald Trump se pronuncie, en un plazo de 90 días, sobre la decisión de volver a clasificar a Corea del Norte como “un Estado que apoya el terrorismo”, una lista estadounidense de la que el país comunista había sido retirado en 2008.