El papa Francisco aterrizó este viernes en Portugal para realizar su primera peregrinación al santuario de Fátima, donde una marea de peregrinos le espera para celebrar el centenario de las apariciones de la Virgen María a tres pastorcitos.
El pontífice argentino tocó tierra a las 16:10 horas local en la base aérea militar de Monte Real, en el centro del país, donde fue recibido por el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa.
“Este viaje es un poco especial, es un viaje para orar y un reencuentro con Dios y la Santa Madre de Dios”, dijo Francisco a los periodistas a bordo de su avión.
En Fátima, los centenares de miles de fervientes peregrinos expectantes estallaron en aplausos cuando vieron en las pantallas gigantes el aterrizaje y luego, con más ímpetu aún, cuando el papa salió del avión.
Francisco recorrerá en helicóptero los cuarenta kilómetros desde la base militar hasta el estadio de Fátima, donde subirá al papamóvil, en el que se dará su primer baño de masas durante cinco kilómetros, hasta llegar al santuario mariano.
Desde la madrugada, peregrinos venidos de todo el mundo confluyeron en este lugar de gran fervor popular, entre oraciones y cantos religiosos, ondeando banderas de sus diferentes países.
La lluvia que había caído en la mañana dio paso a un cielo más despejado la tarde del viernes, reflejando el creciente ánimo de los peregrinos.
“Es una excelente ocasión para encontrarse con el papa, o al menos verlo pasar en el papamóvil. Será maravilloso”, dijo Lintoy Quankep, un sexagenaria de Trinidad y Tobago.
“Este es un gran acontecimiento mundial para la religión católica. Ya vimos al papa en Paraguay cuando fue. Pero es diferente acá, el ambiente es muy religioso”, dice Carolina Palacios, una funcionaria paraguaya de 48 años que peregrinó junto a 60 personas desde su país.
El papa argentino, que profesa una intensa devoción a la Virgen María y aprecia la vitalidad de la piedad popular que él ha podido ver de primera mano entre los más humildes en América Latina, estará menos de 24 horas en Fátima, donde se espera que confluyan hasta un millón de personas.
“Pido a todos ustedes que se unan a mí como peregrinos de la esperanza y de la paz: que sus manos en oración continúen sosteniendo las mías”, escribió en Twitter.
El plato fuerte de su visita tendrá lugar el sábado, 13 de mayo, coincidiendo con el centenario de las primeras apariciones marianas a los tres pastorcitos: Francisco y su hermana Jacinta, muertos muy jóvenes por la gripe española, serán declarados santos por el pontífice en una misa de canonización.
La madre de Jesús se habría aparecido en seis ocasiones, entre mayo y octubre de 1917, a los dos hermanos y a su prima Lucia, a quienes reveló tres “secretos”, que la Iglesia católica consideró como proféticos de la historia del siglo XX.
Tras entrar al santuario en el papamóvil la tarde del viernes, Francisco rezará solo en la Capilla de las Apariciones, erigida en el lugar donde según la creencia popular tuvo lugar, el 13 de mayo de 1917, la primera aparición de la Virgen a los tres pastorcitos.
Luego, bendecirá a los 400 mil peregrinos reunidos en la gran explanada frente a la Basílica de Fátima. Por la noche volverá a saludarlos en la tradicional procesión con velas.