Ejecutivos canadienses temen que la implementación de políticas comerciales de la administración estadounidense afecte la creación de empleos en este país, de acuerdo con una encuesta de la firma Gandalf Group.
La encuesta indica que tres de cada cinco líderes corporativos están preocupados por los eventuales efectos negativos de la aplicación de las políticas económicas del presidente estadundiense Donald Trump en la creación de empleos en los próximos dos años.
La encuesta C-Suite, aplicada a 156 ejecutivos de todo Canadá del 27 de febrero al 24 de marzo, señala que sólo uno de cada cinco confía en la habilidad de Trump para manejar temas como comercio, inmigración y política exterior.
Las tres cuartas partes de los ejecutivos entrevistados consideran que Trump debilitará la moneda local, que este lunes se intercambiaba a 75 centavos de dólar canadiense por cada dólar estadounidense.
“En asuntos clave estamos viendo un significativo grado de incertidumbre y de impredecibilidad”, dijo Karen Hamberg, vicepresidenta de estrategias en la firma Westport Innovatons Inc, con sede en Vancouver especializada en maquinaria de bajas emisiones.
Sin embargo, siete de cada diez ejecutivos dijeron que podrían beneficiarse de la política estadounidense favorable a los negocios.
A pesar de que en los últimos dos trimestres ha existido cierto optimismo respecto al crecimiento económico en Canadá y Estados Unidos, los líderes de negocios mantienen menor optimismo sobre los planes de Trump.
A su vez, 61 por ciento de los encuestados consideró que la Bolsa de Valores de Toronto (TSX) podría beneficiarse si la administración Trump mantiene bajos los impuestos y con su agenda de “mínima regulación”.
Sólo 15 por ciento de los ejecutivos consideró que la administración Trump estaba haciendo una buena representación de su política comercial.
“El proteccionismo va a truncar la tendencia al incremento comercial que se vive en Norteamérica con el Tratado Comercial”, señaló John Simmons, presidente de una empresa de tecnología solar de Victoria, capital de Columbia Británica.
Los ejecutivos del sector servicios mencionaron como principal preocupación la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y las restriccciones al libre comercio, mientras que en el sector de recursos naturales señalaron el potencial impuesto fronterizo como una preocupación.
“No creo que un impuesto fronterizo ayude a tener un buen socio comercial en recursos como el petróleo”, dijo David French, presidente de Penn West Petroleum Ltd.