El gobierno británico de la primera ministra Theresa May prohibirá llevar computadoras portátiles y otros aparatos electrónicos en el equipaje de cabina de ciertos vuelos directos procedentes de seis países de Medio Oriente y África, anunció este martes Downing Street.
En una medida similar a la ya adoptada por Estados Unidos, Gran Bretaña obligará a facturar las computadoras portátiles, teléfonos y tabletas, que sean de mayor tamaño que el de un “smartphone”, a los pasajeros que procedan de Turquía, Líbano, Jordania, Egipto, Túnez y Arabia Saudita.
“La seguridad de los ciudadanos que viajan es nuestra mayor prioridad. Por eso mantenemos nuestra seguridad en la aviación bajo constante revisión y adoptamos medidas que creemos son necesarias, efectivas y proporcionadas”, señaló el portavoz del gobierno.
El Ejecutivo de Londres “ha estado en estrecho contacto con Estados Unidos para comprender su posición”, según informó la misma fuente oficial, que agregó que “se ha informado a las aerolíneas afectadas de los nuevos requerimientos”.
“Las medidas de seguridad adicionales podrían ocasionar alguna alteración a los pasajeros y los vuelos, y comprendemos la frustración que esto ocasionará, pero nuestra máxima prioridad será siempre mantener la seguridad de los ciudadanos británicos”, agregó Downing Street.
Las aerolíneas británicas que resultarán afectadas por esas medidas son British Airways, EasyJet, Jet2.com, Monarch, Thomas Cook y Thomson, mientras que las extranjeras son Turkish Airlines, Pegasus Airways, Atlas-Global Airlines, Middle East Airlines, Egyptair, Royal Jordanian, Tunis Air y Saudia.