La red social estadounidense Facebook casi triplicó su beneficio anual en 2016 a 10.200 millones de dólares, impulsado por el crecimiento sostenido en publicidad en el cuarto trimestre, y sumó más inversiones.
La compañía cerró el año mejor de lo que proyectaban los analistas, además de expandir su audiencia hasta los 1.860 millones de usuarios en diciembre –de los cuales el 66% se conecta cada día–.
Según cifras publicadas el miércoles, Facebook registró un beneficio neto anual de 10.200 millones de dólares y duplicó el del cuarto trimestre hasta los 3.600 millones.
El volumen de negocios creció 5% en los últimos tres meses del año a 8.800 millones de dólares y 54% a lo largo del año hasta alcanzar la cifra de los 27.600 millones.
Estos datos deben tranquilizar a los inversores, que se han mostrado preocupados por ver enlentecer el crecimiento. La propia empresa ha reconocido que prácticamente no hay margen para aumentar la publicidad.
Los ingresos procedentes de este sector subieron de todas formas un 53% en el cuarto trimestre, a 8.600 millones de dólares.
– Más atención en los videos –
El director financiero David Wehner repitió durante una teleconferencia con analistas el aviso que dio hace tres meses: “El nivel de crecimiento de nuestros ingresos publicitarios bajará de forma significativa en 2017”.
Wehner prevé de todas formas “un año de inversiones agresivas” con un aumento de los gastos de entre 40% y 50% comparado con 2016, para financiar el continuo flujo de contrataciones, las actividades relacionadas con I+D, los contenidos o en el marketing.
Facebook ha intentado responder a estas preocupaciones incrementando su atención por los videos, un ámbito que según su fundador Mark Zuckerberg tiene “la misma tendencia (de importancia) que el móvil”, motor de la empresa estos últimos años. En el cuarto trimestre representó el 84% de los ingresos.
La red social ha manifestado su intención de querer seguir invirtiendo en videos originales, aunque al principio quiere concentrarse en contenidos de poca duración, que tienen más probabilidad de ser compartidos por los usuarios, o producidos por empresas y celebridades cuya promoción está de base garantizada.
La compañía también dijo estar trabajando en un modelo que permita compartir los ingresos publicitarios para hacer más contenidos “premium”, de mayor calidad.
– Revés judicial –
Paralelamente, Zuckerberg ratificó a los analistas su intención de “seguir haciendo grandes inversiones en el campo de la realidad virtual”, a pesar de que la empresa sufrió un revés judicial en Texas por este tema.
Después de varias semanas de juicio, su filial Oculus fue declarada parcialmente culpable el miércoles de haber creado su casco Rift usando información robada a la compañía de videojuegos ZeniMax.
El jurado consideró que los daños sufridos por ZeniMax alcanzan los 500 millones de dólares, según un documento judicial al que tuvo acceso la AFP.
Esta cifra es sustancialmente menor a los 4.000 millones de dólares que reclamó la empresa de videojuegos al final del juicio, al afirmar que algunas de sus patentes, códigos informáticos y técnicas sobre realidad virtual fueron claves para desarrollar el casco.
La querella fue presentada en 2014, poco después de que Facebook anunciara la compra de Oculus por 2.000 millones de dólares.
Aunque el jurado no dio toda la razón a ZeniMax, reconoció que los fundadores de Oculus violaron los derechos de propiedad intelectual y no cumplieron el contrato.
ZeniMax adelantó tras el veredicto que pedirá a la justicia que impida a Oculus y Facebook usar sus códigos informáticos, lo que podría perjudicar seriamente la comercialización de Rift.
Facebook no se pronunció sobre la cuestión, pero Oculus anunció que apelará la decisión.