El presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró hoy en su mensaje de fin de año que 2018 será un “año decisivo” para el futuro de la Unión Europea (UE) y afirmó que se implicará en la “batalla” por fortalecer el bloque.
“En el plano europeo el año 2018 será decisivo. Yo me comprometí plenamente en esa batalla porque creo que Europa es buena para Francia, que Francia no puede tener éxito sin una Europa más fuerte”, declaró Macron en su primer mensaje televisado de fin de año como presidente francés.
“Europa puede ser una potencia social, económica, en muchos ámbitos”, subrayó Macron, quien fue elegido el pasado mes de mayo presidente de Francia y desde el inicio de su mandato se ha implicado en impulsar la construcción europea, duramente golpeada por el “Brexit” británico.
En su larga felicitación del nuevo año, de 17 minutos de duración, Macron afirmó que para el fortalecimiento de la Unión Europea Francia trabajará sobre todo con Alemania.
“Seguiré colaborando particularmente con Alemania, que es la condición necesaria para el avance, por lo que todo comienza”, comentó Macron sobre el principal socio político y diplomático de Francia.
El jefe de Estado galo, que este mes de diciembre cumplió 40 años de edad, afirmó que durante sus primeros seis meses de gobierno, que acaban de cumplirse, se esforzó en “hacer lo que me comprometí a hacer” durante la campaña electoral.
En 2018 “continuaré trabajando para hacer a Francia más fuerte y justa, no solo adaptando a nuestro país a los cambios del mundo sino a ser el país que es, un país fuerte”, subrayó Macron.
El presidente francés se refirió también a la crisis de los refugiados y afirmó que “Francia no puede acoger a todo el mundo”.
“No podemos acoger a todo el mundo y sin reglas. Tenemos que controlar la identidad de cada uno”, comentó Macron en su discurso televisado en vivo a las 20:00 horas locales, 19:00 GMT.
“Quien no tenga derecho de asilo no puede permanecer aquí. No será bueno ni para él ni para nosotros”, advirtió en referencia a los denominados inmigrantes económicos.
“Me comprometeré a que este país mantenga su línea de humanidad y de eficacia” en el tema de los refugiados, puntualizó sobre el tema de los migrantes y refugiados.
Sobre los problemas internos de Francia, Macron señaló que “el año 2018 será el año de la cohesión de la nación” porque “nos hemos dividido demasiado”.
“Las divisiones irreconciliables minan nuestro país. Quiero más concordia para Francia en 2018. La fraternidad nos mantiene juntos” expresó Macron como su deseo para el 2018, frente al panorama de división política e ideológica de Francia.
El presidente leyó su discurso en su despacho del Palacio presidencial del Elíseo con las banderas de Francia y de la Unión Europea de fondo así como un gran cartel en el que se leía el mensaje, en francés, “Fraternité” (Fraternidad).