El presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, justificó este lunes el indulto que le otorgó horas antes al exmandatario Alberto Fujimori con el argumento de que como demócrata no podía permitir que muriera en prisión, e instó a los peruanos a no dejarse llevar por el odio.
Durante un mensaje, transmitido por televisión el pasado domingo, anunció el perdón para Fujimori; el cual como resultado generó protestas por parte de familiares de víctimas durante diversos conflictos en los años 1980 y 1990, así como de activistas de derechos humanos.
“La justicia no es venganza, todo indulto es por esencia controversial. Hay un grupo importante de peruanos que se oponen al mismo; mi decisión es especialmente compleja y difícil, pero es mi decisión”, afirmó Kuczynski en el mensaje.
Cientos de peruanos marcharon este lunes por el centro de Lima en contra del indulto y muchos pedían la renuncia de Kuczynski entre cantos de “traidor” y carteles que decían “el indulto es un insulto”. Muchos portaban banderas peruanas y fotografías de las víctimas de la lucha contra el grupo rebelde Sendero Luminoso durante el Gobierno de Fujimori entre 1990 y el 2000.
Cuando la marcha intentó avanzar hacia zonas restringidas, la policía disparó gases lacrimógenos para dispersar a la multitud y se registraron enfrentamientos entre oficiales antidisturbios y manifestantes.
Kuczynski concedió el indulto humanitario en la víspera de Navidad luego que médicos recomendaron la liberación de Fujimori, pocos días después de que partidarios del expresidente liderados por su hijo Kenji lo salvaron de una destitución en el Congreso.
Cabe resaltar que Fujimori, de 79 años, una figura que divide a Perú y quien cumplía en prisión una condena de 25 años por abusos a los derechos humanos, fue internado el sábado en una clínica por un cuadro de “hipotensión” y “arritmia”.
“Quienes nos sentimos demócratas no debemos permitir que Alberto Fujimori muera en la prisión”, dijo Kuczynski.
“No debo ser yo solo el presidente de los que votaron por mí sino de todos los peruanos. Las heridas abiertas solo podrán curarse a partir de un esfuerzo reconciliador y de una voluntad de la que todos debemos formar parte”, resaltó.
Adicionalmente le pidió a los “peruanas y peruanos jóvenes, que las emociones negativas heredadas del pasado no limiten los objetivos que tenemos que alcanzar para terminar de vencer a la pobreza, (…) no paralicemos nuestro país, pasemos esta página y trabajemos todos juntos por nuestro futuro”.
El indulto podría generar una nueva crisis política en el Gobierno de Kuczynski a menos de una semana de que se libró de ser destituido por sus vínculos con la constructora brasileña Odebrecht.
Sus simpatizantes recuerdan a Fujimori como un líder de mano dura que salvó al país del terrorismo y de un colapso financiero, pero sus detractores afirman que fue un déspota que disolvió el Congreso en 1992 y violó los derechos humanos para mantenerse como presidente durante una década.
“Esta ha sido quizás la decisión más difícil de mi vida. Se trata de la salud y las posibilidades de vida de un ex presidente del Perú que habiendo cometido excesos y errores gravísimos fue sentenciado y ha cumplido ya 12 años de condena”, dijo Kuczynski en el mensaje.