El candidato opositor a la Presidencia de Honduras, Luis Zelaya, impugnó este viernes los resultados de las elecciones del 26 de noviembre, que dan la victoria a Juan Orlando Hernández, actual gobernante del país.
“Nosotros estamos presentando una impugnación de acuerdo a ley, reconociendo que estamos planteándola ante el ente que es el actor fallido de este proceso”, dijo Zelaya en una rueda de prensa en Tegucigalpa tras presentar la impugnación en la sede del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El órgano rector de los comicios confirmó el domingo pasado los resultados que otorgan el 42.95 % de los votos a Hernández, que buscó la reelección por el Partido Nacional, mientras que Zelaya consiguió el 14.74 %.
El segundo candidato más votado fue Salvador Nasralla, de la Alianza de Oposición, que denunció un fraude en su contra en los comicios del 26 de noviembre, que obtuvo el 41.42%, y anunció hoy que en las próximas horas también presentará ante el TSE un recurso de nulidad de las elecciones.
Zelaya indicó que las elecciones fueron fraudulentas y que el verdadero ganador fue Nasralla, y aseguró que el reconocimiento de Estados Unidos al triunfo de Hernández “no pondrá un punto final” a la crisis política en el país.
Dijo que respeta la posición de Estados Unidos u otros países que aceptan y felicitan a Hernández, pero reafirmó que los hondureños no pueden estar “cuatro años en incertidumbre, en ingobernabilidad”.
“Ya la gente se cansó, hoy es momento que la clase política del país tome cartas en el asunto, no podemos volver una situación como la que hoy se da”, subrayó el también presidente del Comité Central del Partido Liberal.
El presidente Hernández ha propuesto un diálogo con la oposición para buscar una salida a la crisis política en Honduras, lo que Zelaya rechazó el jueves, aunque hoy volvió a reconocer que el país necesita un “dialogo franco y sincero”.
“En mi condición de presidente del Partido Liberal quiero reafirmar nuestra genuina disposición a un diálogo franco, sincero, sin posiciones intransigentes, en condiciones de igualdad de las partes y con las garantías del respeto absoluto de los derechos humanos”, enfatizó Zelaya.