El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Perú (MinjusDH) negó este jueves que exista un informe médico favorable a la concesión de un indulto humanitario al ex presidente encarcelado Alberto Fujimori (1990-2000), tal como informaron medios locales.
El MinjusDH remarcó en su cuenta en la red social Twitter que ese documento no pertenece a ninguna de las instancias oficiales del Gobierno.
“El informe médico no está en el #MinjusDH ni en la Comisión de Gracias Presidenciales. Por lo tanto, dicho documento que circula en redes no existe para el sector”, enfatizó.
Medios locales informaron previamente que una junta médica había recomendado al Gobierno que otorgara el indulto humanitario a Fujimori, quien cumple una condena a 25 años de cárcel desde el 2009 por delitos de lesa humanidad.
Según el documento apócrifo, tres médicos recomendaron el indulto humanitario por “el estado actual del paciente”.
Medios locales también publicaron este jueves una supuesta solicitud de conmutación de sentencia presentado por Fujimori el pasado 15 de diciembre ante la Dirección de Gracias presidenciales del Ejecutivo.
Según el documento, cuya veracidad no ha sido confirmada por las autoridades, el exmandatario señaló que lleva más de 12 años en prisión y que fue sentenciado por los delitos Contra la vida, el cuerpo y la salud, homicidio calificado, lesiones graves y secuestro agravado.
Estas informaciones fueron difundidas mientras el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, ejerce su derecho a defensa ante el pleno del Congreso por el pedido de destitución presentado en su contra por una presunta “incapacidad moral permanente”.
Kuczynski denunció el miércoles que afrontaba “un golpe de Estado disfrazado”, del que acusó directamente al partido fujimorista Fuerza Popular, que domina el Congreso y ha anunciado su apoyo a la destitución del gobernante.
Fujimori fue sentenciado en 2009 a 25 años de prisión como autor mediato (con dominio del hecho) de dos masacres cometidas en Lima por el grupo militar encubierto Colina en 1991 y 1992, con un saldo total de 25 muertos, y el secuestro de un periodista y un empresario tras el autogolpe de Estado que dio en abril de 1992.