Las fuerzas iraquíes anunciaron este sábado que encontraron dos fosas comunes con 140 cadáveres de civiles asesinados por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en la comarca de Sinyar, en el noroeste del país, en su mayoría de la minoría yazidí.
Una de las fosas, ubicada en la zona de Al Yazira, en el sur de Sinyar, contenía 80 cadáveres de civiles, la mayoría de ellos yazidíes, mientras que la otra, en la población de Qabusi, tenía otras 60 víctimas, entre ellas 20 mujeres y “decenas” de niños, según informó la milicia gubernamental Multitud Popular.
En este sentido, afirmaron que las fuerzas esperan la llegada de los equipos especializados para identificar a los cadáveres mediante análisis de ADN.
Un responsable de la comarca de Sinyar, Mohamed Halil, dijo que hasta ahora se han encontrado en la zona 46 fosas comunes de yazidíes, una minoría religiosa perseguida por el EI.
Halil señaló que hasta ahora el ministerio de Salud iraquí no ha enviado los equipos especializados para analizar los restos, por lo que todavía no se ha podido entregar esos cadáveres a sus familiares.
El 3 de agosto de 2014 el EI irrumpió en Sinyar y los yihadistas asesinaron a por lo menos 4 mil 38 hombres de esa minoría, mientras miles de mujeres y niños fueron secuestrados, según datos de la oficina de Asuntos Yazidíes del gobierno autónomo del Kurdistán.
Otros 360 mil yazidíes, de los 550 mil que vivían en Irak, se han visto desplazados a la región del Kurdistán iraquí, en especial a las provincias de Erbil, Sulaimaniya y Dohuk, la que concentra el grueso de los desplazados por ser la más cercana de Sinyar.