China, primer emisor mundial de gases de efecto invernadero, reveló este martes un proyecto de mercado nacional de carbono, que puede convertirse en la principal plataforma de intercambio de emisiones del planeta.
El país consume cada año más carbón que todos los demás países reunidos. Es muy dependiente además de la energía fósil para la calefacción y la producción de electricidad.
“El lanzamiento del mercado de carbono chino muestra el creciente compromiso en el mundo para fijar un precio a la contaminación y dirigir las inversiones hacia las energías limpias” afirmó Femke de Jong, directora de políticas en Carbon Market Watch, organismo de observación del mercado del carbono basado en Bruselas.