Los cinco opositores, elegidos gobernadores en las elecciones regionales del pasado domingo, en Venezuela, están atados de manos y podrían ceder a las amenazas del presidente Nicolás Maduro y juramentarse ante la Asamblea Nacional Constituyente de corte oficialista, para no quedarse sin sus puestos.
Maduro ya había advertido que las elecciones regionales se repetirían si los cinco gobernadores opositores electos no se subordinaban, por lo que la gobernadora electa del estado occidental del Táchira, Laidy Gómez, anunció que junto a sus colegas electos estudian la posibilidad de acudir a prestar juramento.
La Gaceta Oficial publicó esta semana un decreto que obliga a todos los gobernadores a presentarse ante la Constituyente antes de asumir sus cargos.
Con ese imperativo, los líderes de la coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) podrían tomar la decisión, a pesar de que insisten en que no reconocen este suprapoder, al que consideran fraudulento e ilegítimo, destacó Fance24.
La víspera la jefa de la Asamblea Constituyente de Venezuela, Delcy Rodríguez, insistió en que los cinco gobernadores opositores electos en los comicios regionales deben juramentarse ante la plenaria constituyente para poder asumir sus cargos.
Los gobernadores electos de las regiones de Anzoátegui, Antonio Barreto; Mérida, Ramón Guevara; Nueva Esparta, Alfredo Díaz; Táchira, Laidy Gómez, y Zulia, Juan Pablo Guanipa, no ha podido asumir su cargos debido a que los consejos legislativos regionales, dominados por el oficialismo, se niegan a juramentarlos si no reconocen a la Constituyente, un organismo dominado por el chavismo y que afirma tener poderes plenipotenciarios.
El presidente Maduro dijo el viernes que se realizarán nuevas elecciones en esas regiones si los gobernadores electos rechazan subordinarse a la Constituyente, que tiene 545 escaños, todos chavistas.